Expertos destacan que la ambiciosa agenda verde de Bruselas y la escasez de conductores llevan a los cargadores a ir en esta dirección, aunque reconocen que “aún queda un largo camino por recorrer”.
El transporte por carretera, que mueve más del 95 por ciento de las mercancías en España, sigue siendo el rey del sector, frente al ferrocarril, con una cuota que apenas alcanza el 4 por ciento, pese a los continuos planes activados por el Gobierno para su impulso. Sin embargo, hace meses que soplan vientos de cambio en una industria en pleno proceso de transformación.
El cumplimiento de la exigente agenda climática de Bruselas en su camino hacia las cero emisiones y la escasez de conductores profesionales animan a los cargadores a plantear una estrategia multimodal, combinando carretera, ferrocarril y barco, “clave” para garantizar eficiencia, capacidad y sostenibilidad a largo plazo.
Esta fue una de las principales conclusiones de la jornada organizada el pasado 18 de octubre en el Palacio de la Magdalena de Santander por la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD), con el patrocinio del operador Ewals Cargo Care. El encuentro, que logró reunir a un nutrido grupo de profesionales de la cadena logística, giró en torno a la multimodalidad y la transición ecológica.
“Hay siete iniciativas en marcha en la UE que afectan directamente al transporte por carretera, todas enfocadas a la emergencia climática y ninguna a la emergencia que de verdad tenemos ahora los empresarios, que es la falta de profesionales”. Así de contundente se mostró Ramón Valdivia, vicepresidente ejecutivo de Astic. Valdivia, en su papel de portavoz de la Asociación del Transporte Internacional por Carretera, recordó que “somos una patronal de empresarios; no estamos casados ni con la carretera, ni con el gasóleo. Trabajamos para nuestros clientes y para dar el servicio que necesitan utilizaremos el mejor medio posible que encontremos”. Por ello, hizo hincapié en que “la multimodalidad será brillante en la medida que nos ayude a ser más eficientes y competitivos”. De lo contrario, “conseguiremos reducir las emisiones, pero por el decaimiento de la actividad económica”, sentenció.
“El futuro de la multimodalidad ya es el presente”, señaló en un tono claramente optimista Pedro López, director ejecutivo de la región sur de Ewals Cargo Care, multinacional que tiene la intermodalidad en su ADN. Eso sí, con los pies en el suelo, reconoció que “aún queda un largo camino por recorrer hasta conseguir que España pueda presumir de soluciones logísticas multimodales equiparables a las existentes en Europa”. López puso el foco en el transportista, actor “fundamental” en la cadena de suministro, y al que “hay que cuidar”. Tampoco pasó por alto la importancia de la colaboración entre navieras, transportistas y empresas ferroviarias para que la multimodalidad sea un caso de éxito. “Somos compañeros de sector, no competencia”, concluyó.
En la misma línea se pronunció Samuel Nevado, director general de la Unidad de Negocio de Transporte en Transfesa Logistics. “Para el desarrollo de un transporte sostenible, desde el punto de vista social, económico y medioambiental, la clave está en la capacidad que tenga la carretera y el ferrocarril de establecer alianzas. Está en nuestras manos”. Entre las causas del escaso avance del tren de mercancías, Nevado destacó el “escaso éxito del proceso de liberalización, las altas barreras de entrada a la hora de acceder al material rodante y las infraestructuras, que no han evolucionado a la misma velocidad del mercado”. Con todo, se mostró optimista: “algo está cambiando”. Entre los motivos, enumeró tres vectores: el medioambiental, las dificultades de las pequeñas empresas de transporte por carretera en un contexto inflacionista y la escasez de conductores.
‘Ecoincentivos’
Antonio Pérez Millán, presidente de UOTC, también realizó una fotografía del transporte intermodal en España, que se mueve en niveles del año 2000, y muy lejos de la evolución del IPC. “Los poderes públicos tienen mucho que decir”. En cuanto a los ‘ecoincentivos’, “la única ayuda que ha llegado” para el impulso del ferrocarril, Pérez Millán señaló que “deberían ir al prescriptor de la carga”, como ocurre en el transporte marítimo. Una opinión que también compartieron varios de los ponentes. Por último, volvió a reclamar la creación de una unidad intermodal dentro del Ministerio de Transportes, y mostró su preocupación por los costes. “Se necesitan trenes más grandes y largos que permitan ser competitivos”, remarcó Pérez Millán, con la nueva directiva de pesos y dimensiones, como telón de fondo.
Por otro lado, Víctor Esteban, de la Fundación Corell, sostuvo que “la transición energética será más larga de lo previsto”, tras confirmar que las soluciones que tiene hoy el transporte por carretera de larga distancia son el diésel y el GNL. Así las cosas, las opciones son “seguir mejorando los vehículos y buscando alternativas en soluciones basadas en la naturaleza, generando derechos de emisión”. En este sentido, avanzó que “la renovación completa de la flota en Europa nos va a llevar 20 años”, por lo que, “vamos a tener que compensar emisiones durante mucho tiempo”, lamentó.
En cuanto a la multimodalidad, como principales desafíos, Esteban destacó la calidad de servicio, proyectos a escala europea, el desarrollo de una malla modal de alta capacidad de transporte por ferrocarril, inversiones privadas y los plazos administrativos.
La apertura de la jornada corrió a cargo del presidente de la Autoridad Portuaria de Santander, César Díaz, que recordó que “la competencia no se realiza entre puertos, sino entre cadenas logísticas, y deben estar perfectamente engrasadas para que nuestro tejido productivo sea lo más competitivo posible”. Díaz también apostó por la multimodalidad, que “parece el camino correcto para avanzar hacia la descarbonización”. En este sentido, lamentó que “el trasvase la carretera al ferrocarril va más lento de lo que nos gustaría, debido a las insuficientes infraestructuras y una escasa inversión”. Por último, anunció que trabajará con Adif, Renfe y el resto de administraciones implicadas para que el puerto “aumente su ratio de transporte ferroportuario, que ahora se sitúa en el 16 por ciento”, uno de los más altos del sistema portuario español.
En el encuentro, bajo el título “El futuro de la multimodalidad en Europa”, también participaron Jaime González (Ewals Cargo Care), José Antonio del Río (UECC), Roberto Castilla (Brittany Ferries), Pablo Pellon (CLdN Shipping Lines Spain), Cándido Pérez (KPMG), Santiago Díaz (Autoridad Portuaria de Santander), Enrique Bergés (Saica) y Pablo Alonso (BS España).