La zona evoluciona de punto de tránsito obligado a captador de inversión logística, según el subdirector del puerto de Algeciras.
El Estrecho está evolucionando “desde mero punto de tránsito obligado para la industria del contenedor a nodo concentrador de la inversión logística”, según Gerardo Landaluce, subdirector de Desarrollo del puerto de Algeciras. En su opinión, el gigantismo de los portacontenedores es una oportunidad para los puertos del Estrecho
La localización, la desviación cero de las grandes rutas de transporte de contenedores, lo que se traduce en un ahorro en tiempo de tránsito y en combustible para los armadores, y el gigantismo de los buques portacontenedores, suponen verdaderas oportunidades para los puertos del Estrecho, caso de Algeciras y Tánger Med, que están evolucionando desde su condición de dársenas de transbordo a nodos captadores de inversiones logísticas.
Así se expresó Gerardo Landaluce, subdirector general de Desarrollo y Comercial de la Autoridad Portuaria de Algeciras, durante su ponenencia en el marco de la presentación de la Red Logística Andaluza en el SIL de Barcelona, el pasado 8 de junio. “El encaminamiento de la mercancía desde los grandes centros de producción a los principales mercados de consumo se hace a través de importantes puntos de paso, como el Estrecho de Gibraltar, el Canal de Suez, el Estrecho de Malaca o el Canal de Panamá. Estos nodos, estratégicos por su ubicación, están pasando de ser meros puntos de tránsito obligados a concentradores de inversión portuaria y logística”, aseguró Landaluce.
En su opinión, el Estrecho “es una verdadera autopista marítima, con más de 100.000 buques al año, dos terceras partes en la ruta Este-Oeste y una tercera en la ruta Norte-Sur. Además, su localización es un verdadero factor de competitividad para los armadores, porque disfrutan de una ‘desviación cero’ de las principales rutas marítimas, concepto cada día más importante para las navieras por el incremento del precio de combustible, que supone el 50 por ciento de sus costes operativos.
La desviación cero permite ahorrar tiempo de tránsito y combustible a las navieras. Por estas razones, el Estrecho se está convirtiendo en un punto de encuentro para las inversiones logísticas y portuarias”, subrayó. En su conferencia en el SIL, Landaluce añadió que “el gigantismo de los buques es otro referente en la evolución de la industria. Por esto, es importante subrayar que uno de los principales factores de competitividad del puerto de Algeciras es el calado.
Sólo para contenedores, disponemos de cálados que van desde los 16,5 a los 18,5 metros, suficiente para los ULCV e incluso para el nuevo prototipo de Maersk Line, conocido como ‘Triple E’, con capacidad para 18.000 TEUs”, frente a la referencia actual de la ‘Serie E’, de 14.800 TEUs”. Por último, el subdirector de Desarrollo del puerto concluyó que “estos grandes buques nodriza escalarán en el Estrecho, bien en Algeciras o en Tánger Med, o en ambas dársenas, concetando Asia y Europa, con un tiempo de tránsito de 20 días a una velocidad media de navegación de 20 nudos, pero también en el eje Norte-Sur, lo que a su vez representa un potencial en términos de conectividad para el mercado y los puertos africanos”.