Plaza Servicios Aéreos, la aerolínea promovida por el Gobierno de Aragón y que quebró el pasado año, acumuló pérdidas por un importe cercano a los nueve millones de euros, según ha reconocido el viceconsejero de Obras Públicas y Transporte de Aragón, Carlos Escó. La compañía, que nació en 2006 con el objetivo de atender conjuntamente la demanda de vuelos de pasajeros y carga -a través de Plaza Cargo-, sólo se mantuvo activa durante dos años escasos.
Escó informó recientemente en comparecencia pública ante las Cortes regionales de que, en estos momentos, se estudia una oferta de compra por parte de un grupo empresarial para hacerse con el nombre de la aerolínea. El viceconsejero reconoció que el importe a pagar de llegarse a un acuerdo será anecdótico, puesto que “en este caso, una venta a cero ya es una ganancia”.
En todo caso, fuentes solventes aseguran que el mencionado grupo empresarial sólo se haría cargo de la marca comercial. En concreto, Plaza Cargo, filial de carga de Plaza Servicios Aéreos, cesó en su actividad el 30 de noviembre de 2007, apenas 21 meses después de ponerse en marcha.
La decisión del Gobierno de Aragón se tomó en aquel momento tras haber tenido conocimiento de un informe que señalaba “la falta de viabilidad comercial del proyecto”. Para el viceconsejero de Obras Públicas y Transportes de Aragón, la explicación del fracaso de la aerolínea tiene mucho que ver con “el error al elegir el momento de su creación”.
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