Debido a la competencia creciente y a la caída de la demanda de los neumáticos para camión, Michelin ha anunciado que cerrará a mediados de 2015 su planta húngara de Budapest, donde fabrica ese tipo de cubiertas.
La medida supondrá la destrucción de 512 puestos de trabajo y tendrá un coste de 39 millones que la francesa anotará en la contabilidad del primer semestre del presente ejercicio. Desde 2007, en que la demanda europea de neumáticos para camiones alcanzó un máximo, dicha cifra se ha recortado un 23 por ciento, lo que ha forzado a Michelin a tomar medidas para recortar costes.