Un transportista podría llegar a pagar hasta 3.000 euros por la manipulación de estos aparatos, que sólo puede realizarse si está involucrado un centro técnico especializado
El hallazgo en Cataluña de los dos primeros tacógrafos digitales manipulados, en teoría inexpugnables, ha hecho encender todas las alarmas y ha puesto a los talleres en el punto de mira. Un transportista podría llegar a pagar hasta 3.000 euros por la manipulación de estos aparatos, que sólo puede realizarse si está involucrado un centro técnico especializado.