CEVA Logistics ha cerrado el ejercicio en línea con los pronósticos de la dirección, con la única excepción de la ralentización de la actividad en el último trimestre. De hecho, la empresa señala que sus niveles de negocio son hoy por hoy superiores a los registrados antes de la recesión. Los ingresos aumentaron un 25 por ciento, y el EBITDA alcanzó los 292 millones de euros, lo que representa un crecimiento del 25 por ciento. Sin embargo, el beneficio bruto de la empresa experimentó el impacto negativo de unos costes excepcionales de 74 millones de euros.
Como de costumbre, el mayor crecimiento procedió de la unidad de negocio transitario, que facturó 3.400 millones de euros con una progresión del 45 por ciento. Rubin McDougal, director financiewro de la compañía, señala que “el año se dividió en dos partes muy distintas la una de la otra: el aumento de la demanda extrema y la carestía de capacidad fueron relajándose a lo largo del año, hasta que en el cuarto trimestre se ralentizó el crecimiento. El margen de beneficio llegó a comprimirse en este periodo, pero los efectos fueron mitigados por mejores eficiencias operativas”.
A pesar de que los márgenes siguen debilitándose en algunas áreas de negocio, McDougal ha afirmado que CEVA Logistics se ha asegurado de tener capacidad de respuesta a la demanda al aumentar la contratación por adelantado para 2011. La logística de contrato creció un 9,4 por ciento (3.433 millones de euros), aunque estos resultados se vieron afectados por las fluctuaciones de las divisas.
El sector de la automoción continuó recuperándose en 2010, así como la alta tecnología y la electrónica de consumo. Por regiones, el Sur de Europa, Oriente Medio y Africa fueron las zonas más dinámicas para el operador logístico. Las pérdidas de la empresa antes de impuestos fueron de 239 millones de euros.
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