Coma y Ribas, cuyo núcleo de negocio es la actividad transitaria, ha internalizado servicios de almacenaje, que con anterioridad subcontrataba, en una plataforma propia ubicada en la provincia de Barcelona (Santa Perpètua de Mogoda). La compañía, que contaba exclusivamente con oficinas en la capital catalana, persigue incrementar su actividad logística. Ahora, dispone de un almacén de 6.000 metros cuadrados, así como 750 más de oficinas.
Los servicios logísticos de Coma y Ribas incluyen la manipulación de carga peligrosa. Estas labores en la nueva plataforma son un primer paso en su apuesta por la diversificación, “queremos desarrollar nuevas actividades en un futuro”, señala Joaquim Cabané, administrador de Coma y Ribas. Coma y Ribas registró un volumen de negocio de 14,75 millones de euros en 2011, según el Libro Blanco del sector de TRANSPORTE XXI. La empresa, creada en el año 1924 por las familias Coma y Ribas, está controlada por el operador francés Charles André.