El acuerdo alcanzado con la eólica podría desembocar en el futuro traslado de su hub de distribución mundial de componentes desde la plataforma Arasur a la rada vizcaína.
El puerto de Bilbao capta el tráfico de aerogeneradores de Gamesa, que hasta ahora se exportaban por Santander, y abre la puerta a su desembarco. El acuerdo alcanzado con la eólica podría desembocar en el futuro traslado de su hub de distribución mundial de componentes desde la plataforma Arasur a la rada vasca, según fuentes del sector
El puerto de Bilbao ha recuperado el tráfico de las palas y nacelles de los aerogeneradores de Gamesa Corporación Tecnológica, que hasta ahora se exportaban por la rada de Santander. Así lo adelantó el presidente de la Autoridad Portuaria, Asier Atutxa, que no quiso desvelar más detalles del acuerdo alcanzado con la eólica, que abre la puerta a su implantación en el puerto. Al cierre de esta edición, la compañía había comenzado a depositar sus equipos en el muelle A3 de la dársena vasca. La previsión manejada por el organismo portuario es que el nuevo tráfico comercial arranque a lo largo de este mes de mayo.
La operación, no obstante, podría tener mayor calado a medio plazo. Fuentes del sector de toda solvencia aseguraron a TRANSPORTE XXI que el acuerdo con Gamesa podría desembocar en el futuro traslado de su hub de distribución mundial de componentes desde la plataforma logística alavesa Arasur, donde cuenta con más de 250.000 metros cuadrados de superficie, al puerto de Bilbao, a menos de 100 kilómetros de distancia. Algunos interlocutores consultados llegaron a señalar, incluso, que ya existiria un principio de acuerdo para facilitar el desembarco de Gamesa en la dársena vasca.
Este periódico ha intentado, sin éxito, ponerse en contacto con responsables de las actividades logísticas de Gamesa para confirmar el posible interés de la compañía en ubicar su centro de distribución de componentes eólicos en las instalaciones del puerto de Bilbao. La Autoridad Portuaria, por su parte, se limitó a señalar que mantiene negociaciones muy avanzadas para acoger varias implantaciones industriales de una “dimensión importante”, aunque, obviamente, no desveló sus nombres. Atutxa, eso sí, se mostró “muy optimista” y espera que alguna de las conversaciones abiertas fructifiquen antes de finales de este año, lo que permitiría elevar la ocupación del suelo a cerca del 85 por ciento. En paralelo, el presidente del organismo portuario quiere impulsar la ejecución de tres nuevos muelles, punto y final de las obras de ampliación iniciadas en 1992.
El proyecto constructivo del denominado ‘Espigón Central’ permitirá ganar una superficie próxima a los 600.000 metros cuadrados, con cerca de 2 kilómetros de línea de atraque y 21 metros de calado, que destinará a la captación de nuevos negocios. La Autoridad Portuaria de Bilbao está redactando actualmente el proyecto, que espera tener terminado para este verano. La inversión prevista podría rondar los 130 millones de euros, frente a los 180 millones que se manejaban hace un par de años cuando se empezó a hablar del proyecto, según apuntó Asier Atutxa.
Atutxa espera crecer un 2%en 2014, pese a la caída del 6% en el tráfico hasta marzo
La Autoridad Portuaria de Bilbao mantiene la previsión de cerrar 2014 con un crecimiento del tráfico del 2 por ciento, pese a la caída del 6 por ciento en el primer trimestre, que la entidad achaca a los fuertes temporales que azotaron la costa Cantábrica en enero y febrero. El presidente del organismo portuario, Asier Atutxa, confía en que el aumento del 4 por ciento registrado en marzo continúe en los próximos meses, lo que permitiría recuperar el terreno perdido.
Como ya adelantó este periódico, las condiciones meteorológicas tan adversas que tuvieron lugar en los primeros meses del año en la zona norte del país impidieron el atraque de grandes buques, sobre todo de graneles líquidos, que representan más del 50 por ciento del tráfico total del puerto. Por el contrario, la mercancía general convencional aumentó un 12 por ciento en el acumulado anual hasta marzo, mientras que la carga general en contenedor creció un 4 por ciento en el primer trimestre del año.
De confirmarse los pronósticos de evolución del tráfico manejados por la Autoridad Portuaria para este año, se consolidaría el cambio de tendencia iniciado en 2013 que se cerró con un crecimiento del 2,2 por ciento y un movimiento de cerca de 30 millones de toneladas. Una estadística que supuso revertir una situación marcada por el descenso de la actividad en los últimos cinco años, como consecuencia de la crisis. La recuperación vino fundamentalmente de la mano de los graneles líquidos, que comenzaron a dar síntomas de recuperación.