La actividad portuaria ha descendido ligeramente, pero ha aumentado la facturación durante la primera mitad del ejercicio.
El puerto de Róterdam, al frente del ranking de la UE por volumen de mercancías, que se mantuvo plenamente operativo durante la pandemia, ha salvado los números de la primera mitad del ejercicio tras registrar un tráfico de 218,9 millones de toneladas, lo que representa una caída del 9,1 por ciento con respecto al mismo periodo de 2019, que fue un año de récord.
Por su forma de presentación, la dársena holandesa movió 30,8 millones de toneladas de carga seca, lo que es una reducción del 19 por ciento en comparación con 2019. La disminución del volumen se debió principalmente al mineral de hierro y chatarra (-22 por ciento) y carbón (-34 por ciento). La carga seca representa el 14 por ciento del tráfico total del puerto de Róterdam.
Por otra parte, la dársena registró un tráfico de 99,8 millones de toneladas de graneles líquidos, lo que supone aproximadamente 10 millones de toneladas menos que en el primer semestre de 2019, una disminución de más del 9 por ciento. En Róterdam, el 46 por ciento de todo el volumen de transbordo corresponde a graneles líquidos. El movimiento de productos de aceite mineral cayó bruscamente un 22 por ciento. La disminución en el petróleo crudo experimentó solo una leve caída del 4 por ciento, mientras que el rendimiento de gas natural licuado mostró un aumento del 2,6 por ciento. El precio del gas ha caído aún más debido a la pandemia, lo que hace que sea atractivo usar GNL del Mar del Norte y el Océano Atlántico para la generación de energía en Europa.
El tráfico de contenedores mostró una disminución en comparación con 2019 de solo un 3,3 por ciento en toneladas y un 7 por ciento en TEUs. Ello significa 2,5 millones de toneladas menos de carga. Las compañías navieras han cancelado hasta el 20 por ciento de todos los servicios en mayo y junio. Sin embargo, la caída en el rendimiento fue menos pronunciada debido al aumento en el tamaño de los barcos que hacen escala en el puerto.
El segmento de carga a granel mostró una disminución en la primera mitad del 11 por ciento y el volumen de carga ro-ro disminuyó en un 12 por ciento. El principal declive ocurrió a principios del segundo trimestre, cuando el bloqueo estaba localizado en la mayor parte de Europa occidental. Los volúmenes aumentaron nuevamente hacia el final del trimestre.
Con todo, la facturación aumentó un 0,7 por ciento hasta los 360,4 millones de euros y el resultado de las actividades ordinarias disminuyó un 4,8 por ciento, con 128,4 millones de euros. Según la Autoridad Portuaria de Róterdam, esto supone “una posición financiera saludable que permite importantes inversiones, que ascienden a 136,4 millones de euros”.