La dársena capitalina se hace un hueco como puerto principal de la red TEN-T, lo que le dará acceso a fondos comunitarios.
El puerto de Santa Cruz de Tenerife, tras muchos esfuerzos y mucho lobby, no se ha quedado fuera del mapa europeo de transporte. La Comisión de Transportes del Parlamento Europeo ha dado luz verde a su inclusión en la red básica TEN-T, lo que le permitirá acceder a fondos comunitarios para financiar sus proyectos
El puerto de Santa Cruz de Tenerife, que preside Pedro Rodríguez Zaragoza, continúa de enhorabuena. Al reciente desembarco de Terminal de Contenedores de Tenerife (TCT), participada por OHL Concesiones y Marítima Dávila, que abrirán el negocio del transbordo internacional a la dársena, se suma ahora su inclusión como puerto de la red básica Transeuropea de Transporte (TEN-T). Y es que la Comisión de Transporte del Parlamento Europeo, en la sesión celebrada el pasado 18 de diciembre, aprobó introducir el puerto de Santa Cruz de Tenerife y el aeropuerto Reina Sofía en la citada red, lo que supondrá que ambas instalaciones se podrán beneficiar de los fondos comunitarios para cofinanciar sus proyectos.
En el caso de la Autoridad Portuaria, según palabras de su presidente Rodríguez Zaragoza, “los fondos de Bruselas ayudarán a financiar la construcción de la dársena de Granadilla, ubicado al sur de la isla, y la mejora del muelle Los Cristianos en el puerto capitalino. Además, en la sesión de la comisión parlamentaria, también se sumó al aeropuerto de Gran Canaria. Dentro de esta red básica TEN-T ya estaba incluido el puerto de Las Palmas de Gran Canaria. La enmienda que ha dado luz verde a que la isla no quede fuera del mapa europeo de transporte está pendiente de su ratificación por el plenario en los primeros meses de este año.
El verdadero escollo que queda por superar se encuentra en el apartado económico. La Comisión, con el vicepresidente Kallas a la cabeza, y el Parlamento defienden la constitución de un fondo que dedique 30.000 millones al desarrollo de la red TEN-T para 2014-20. Pero quien tiene la última palabra en este asunto son los Estados miembros, que aún tienen que decidir el presupuesto de la UE para el citado período. En la inclusión del puerto capitalino en la red TEN-T hay que destacar el papel que ha jugado la plataforma ‘Tenerife Se Mueve’, que con carácter integrador y al margen de las clásicas divisiones políticas, consiguió reunir la firma de 30.000 ciudadanos para presionar a Bruselas.