Aznar advierte del riesgo de la nueva política de bonificaciones para los puertos inversores.
El puerto de Valencia reforzó en el marco abierto de la gala anual de la Asociación Naviera Valenciana su estrategia anticrisis en ajustar costes de estiba y transporte en un escenario de paz social y sosiego. Aznar advirtió del riesgo que contiene la política de bonificaciones de la futura Ley de Puertos para los puertos con planes de inversión
El presidente de la Autoridad Portuaria de Valencia, Rafael Aznar, afirmó que sigue vigente la estrategia anticrisis de la dársena en el marco de la gala anual que celebra la Asociación Naviera Valenciana que preside Vicente Boluda. Ante la crisis, la estrategia es “estar pegados al mercado, inteligencia para el progreso, ajustes con estabilidad social y pasos hacia adelante, como una eficiencia comprometida”. Aznar afirmó que hay que reforzar el concepto tecnológico e-port y cohesionar a toda la comunidad portuaria con la Marca de Garantía, de la que señaló que “es otro de los activos vertebradores que permite realizar una acción conjunta con una calidad de servicio contrastada” y cuya financiación está asegurada por la Autoridad Portuaria de Valencia.
“Es un activo que tenemos que proteger”, recalcó, tras la salida de la Generalitat Valenciana del patronato de la Fundación Marca de Garantía ante el recorte presupuestario autonómico. Para Aznar “la situación es compleja, pero estamos en mejor posición que otros puertos”, afirmando que “debemos hacer más con menos, con más esfuerzo, y debemos ajustar bastantes cosas, ajustarlo con paz y sosiego, tenemos que resolver asuntos de la estiba y del transporte y vamos a intentar ver las cosas con el vaso medio lleno”. Aznar mostró su satisfacción por la futura Ley de Puertos en cuanto que “vamos a tener un marco legal estable con el consenso de los dos principales partidos políticos de España”, lo que supone que “la ley nacerá con vocación de casi perpetuidad”.
Aznar confirmó que “en esa ley hay cosas que nos gustan mucho y otras que no nos gustan tanto y que lucharemos para que se perfeccionen a través de reglamentos u órdenes ministeriales”. En concreto, el presidente del puerto de Valencia advirtió del riesgo que conlleva la política de bonificaciones que contiene el nuevo marco legislativo para los puertos inversores.
Rafael Aznar señaló que “me preocupa que cuando se da cancha para hacer bonificaciones a los tráficos comerciales no se mide la gestión por los resultados brutos de explotación, que sería lo razonable, sino por los resultados netos, lo que supone un riesgo para los que estamos inmersos en planes de ampliación porque nos pueden ajustar con los costes financieros y nos puede dejar fuera del mercado” con tarifas más altas que aquellos puertos que no tienen que afrontar inversiones.
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