Noatum impugna judicialmente el acuerdo del consejo por el que la instalación puede trabajar los barcos de otros armadores porque “no comparte el mismo criterio jurídico”.
El puerto de Valencia afirma que vigila ‘buque a buque’ la operativa de la terminal de MSC, saliendo así al paso de las críticas de Noatum que “no comparte el mismo criterio jurídico” en el contrato de concesión. Noatum ha impugnado judicialmente el acuerdo del consejo por el que se abre la terminal de la naviera suiza a otros armadores
La Autoridad Portuaria de Valencia está vigilando ‘buque a buque’ la operativa de la terminal dedicada de MSC en la dársena, al objeto de que se cumpla el contrato de concesión que tiene la compañía. El Consejo de Administración del puerto de Valencia autorizó el pasado 19 de febrero una propuesta de interpretación de la disposición general decimoctava del condicionado de otorgamiento de la concesión de MSC Terminal.
Esta disposición estipulaba la clase de tráfico que la instalación podía atender. En este sentido, Rafael Aznar recordó el pasado 7 de mayo, tras una nueva sesión del Consejo de Administración, que “a petición de MSC tuvimos que interpretar una cláusula que hacía mención a las posibilidades de los buques que podían atracar en la terminal que aprobamos en febrero soportado por un informe jurídico de la asesoría de Puertos del Estado que lidera un abogado de alta reputación”. Aznar señaló que “a la luz de los actuales acuerdos comerciales y operacionales entre líneas marítimas se emitió ese informe y el consejo hizo bueno el dictamen de Puertos del Estado”.
Este informe permite a la terminal de MSC operar todos los buques donde la naviera suiza acredite el control operacional. En el fondo permite trabajar los servicios de la futura alianza P-3 formada por Maersk Line, MSC y CMA CGM, así como cualquier buque de una joint venture, un problema para Noatum. El presidente del puerto de Valencia ha señalado que “perseguimos el interés general portuario. Lo hacemos con la Ley en la mano, atendiendo a las demandas de nuestros clientes”. El dirigente recordó que “para nosotros están en pie de igualdad los inversores y los clientes, porque sin unos no hay otros.
Tratamos con cariño, esmero y atención los dos frentes”. Aznar matizó que “en el acuerdo del consejo se encomendaba a la dirección que requería un desarrollo del ‘caso a caso’, para ver si se cumplían las condiciones que se planteaban”. El dirigente indicó que “lo que se está concluyendo del análisis de la documentación que se ha aportado, que está siendo examinada por nuestros servicios jurídicos con los criterios emanados por la Abogacía del Estado y por el asesoramiento de un experto maritimista, es que se está confirmando el cumplimiento del concepto exigido del control operativo”.
El organismo sale así al paso de las críticas de Noatum que “no comparte el mismo criterio jurídico” en el contrato de concesión de la terminal de MSC, según ha señalado el presidente del puerto valenciano. Aznar apuntó que “todo el mundo tiene derecho legítimo a defender sus intereses, pero tenemos la garantía jurídica de nuestro modo de actuar, pero el derecho a discrepar está ahí y el derecho a interponer recursos. Es un tema que vemos desde la más absoluta serenidad”.
NOATUM, AL JUZGADO
Al cierre de esta edición Noatum no había hecho pública su postura acerca de la interpretación de la concesión de la terminal de MSC. El grupo presentó el pasado 22 de abril ante la sección primera de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de Valencia una demanda de impugnación de los acuerdos tomados por el consejo del puerto, según confirmaba el TSJ y fuentes de la Autoridad Portuaria a TRANSPORTE XXI.
Directivos de Noatum, bajo el soporte financiero de fondos de JP Morgan, han criticado en privado veladamente a la dirección del puerto de Valencia por el caso de la instalación dedicada de MSC. Afirman que “perjudica a las terminales públicas”, ampliando así la competencia con las otras terminales.