El enclave estima que agilizar el despacho de mercancías podría ahorrar a los empresarios españoles unos 100 millones anuales.
El puerto de Vigo ha hecho los deberes y ya tiene todo listo para la prueba piloto de ‘ventanilla única’. Una vez concluidos los trabajos previos de coordinación a nivel local, con la asistencia técnica del Grupo Taric y GB Auditores, que se han prolongado durante casi un año, sólo falta el ‘sí’ de Aduanas para el pistoletazo de salida, según confirmaron a este periódico fuentes de la Autoridad Portuaria que preside Ignacio López Chaves.
El objetivo es claro: agilizar y simplificar los trámites aduaneros para reducir los tiempos de espera en los despachos de mercancías y los costes que soportan los operadores económicos, lo que supondría un salto cualitativo para los puertos españoles en términos de competitividad. Sólo en lo que hace referencia a los retrasos en el despacho, el ahorro de costes para los empresarios españoles podría alcanzar los 100 millones de euros anuales, si se adoptaran las medidas para rebajar en un día las tramitaciones, teniendo en cuenta que los puertos españoles despachan cerca de un millón de contenedores para importación.
El dato se recoge en un estudio de la Autoridad Portuaria de Vigo y el Consorcio de la Zona Franca, que estima el coste de un contenedor mientras permanece en un puerto en unos 100 euros al día (140 euros si se trata de mercancía refrigerada). En el caso concreto del puerto de Vigo, que en 2010 importó de terceros países más de 40.000 contenedores, el ahorro se situaría en unos 4 millones. La cuestión no es baladí, ya que en 2008 se llegaron a detectar casi 4.000 contenedores que, teniendo como destino final empresas de Vigo, realizaron la descarga en Leixoes, a menos de 150 kilómetros de la dársena gallega.
MEDIDAS PLANTEADAS
Entre las medidas planteadas en los trabajos que se han llevado a cabo hasta la fecha en Vigo destacan el inicio inmediato de un proceso de implantación de un entorno de ventanilla única; el establecimiento de mecanismos de coordinación para la inspección única, a fin de garantizar que los contenedores que deban ser revisados por más de un organismo se abran en el mismo momento y lugar; y la configuración de un sistema ágil de intercambio de información.
Un proceso que debería liderar la Aduana, con competencias sobre el resto de organismos inspectores, para poder ejercer las tareas de coordinación, evitando duplicidades innecesarias y la pérdida de tiempo y recursos. El propio presidente de la Autoridad Portuaria de Vigo, Ignacio López Chaves, reitera, en este sentido, la importancia de agilizar los despachos de la mercancía, especialmente de pesca congelada, tras destacar la mejoría experimentada en la dársena, que de los 20 días de espera de media en 2006 ha pasado a oscilar entre uno y tres días.