Porro reclama a Sanidad agilizar la operativa y recuerda que las demoras pueden causar costes de 25.000 euros por contenedor.
El puerto de Vigo pierde más de 120.000 toneladas por el mal funcionamiento del PIF, según denuncian empresarios y usuarios de la dársena. La presidenta de la entidad, Corina Porro, presenta a Sanidad las nuevas instalaciones para agilizar la inspección y dice que los retrasos pueden ocasionar costes de 25.000 euros por contenedor
El deficiente funcionamiento del Puesto de Inspección Fronteriza (PIF) del puerto de Vigo ha hecho saltar las alarmas en la comunidad portuaria. Empresarios y asociaciones de usuarios denuncian la pérdida de competitividad de la dársena por los continuos retrasos en la inspección, que está provocando “el desvío de más de 120.000 toneladas de carga, especialmente congelada y perecedera, a otros puertos cercanos como Leixoes, en Portugal”, que podría ir acompañada de “futuras deslocalizaciones de empresas”. La propia presidenta de la Autoridad Portuaria de Vigo, Corina Porro, apunta que “los problemas del PIF no son de infraestructura sino de gestión documental”.
Entre los datos aportados, Porro señaló que “el puerto luso de Leixoes tiene dos inspectores y dos bocas de inspección que tienen programadas para este año 7.800 inspecciones”, mientras que “las instalaciones del puerto de Vigo tienen 16 inspectores que realizan 14.000 inspecciones, con un plazo medio de entre 2 y 8 días para la inspección documental”. La presidenta de la dársena destacó, en este sentido, que “el puerto de Vigo puede aspirar a una estancia de la mercancía no superior a las 48 horas” y lamentó que “se produce un gran retraso en la adopción de decisiones en los casos en que los inspectores realizan consultas que deben resolverse fuera del PIF que pueden alcanzar los 50 días, con unos costes asociados que pueden llegar a los 25.000 euros por contenedor”.
Al mismo tiempo, señaló que “existen datos tan preocupantes como que las compañías de seguros obligan a poner límite a las cantidades que se importan por el puerto de Vigo para renovar las primas”. En una reciente visita al PIF, Corina Porro recordó que la ampliación de las instalaciones fue comunicada al Ministerio de Sanidad el pasado 5 de noviembre y que las mismas han quedado a su disposición para ser utilizadas, pero -al cierre de esta edición- “no se ha hecho”.
Las obras han permitido aumentar de 6 a 8 las bocas de inspección para Sanidad Exterior y se incrementa en más de 1.000 metros cuadrados el espacio para oficinas, laboratorios y salas de inspección, que pasan a ser un total de 2.308 metros cuadrados. Como respuesta, el delegado del Gobierno en Galicia, Antón Louro, se comprometió a “agilizar” los trámites necesarios para la entrada en servicio de estas instalaciones.