El descenso de actividad en noviembre y diciembre reduce el crecimiento anual al 3,3%, lejos del 8% previsto al inicio del año.
El puerto seco de Coslada en Madrid logró salvar en positivo el ejercicio 2008 pese al desplome en la actividad registrado en los dos últimos meses del año. El tráfico total del pasado año en la terminal ferroviaria madrileña alcanzó un crecimiento del 3,3 por ciento en TEUs, aunque muy alejado del 8 por ciento inicialmente previsto
El puerto seco de Coslada finalizó el año 2008 con un crecimiento del 3,3 por ciento en la cifra de TEUs manipulados, lo que representa una pérdida de más de 4 puntos sobre las previsiones iniciales, que situaban este incremento en el 8 por ciento. El número de TEUs total manipulados en el puerto seco madrileño se situó en los 61.484, frente a los 59.493 de 2007. Los dos últimos meses del año, con caídas en el tráfico de TEUs del 13 por ciento en noviembre y del 17 por ciento en diciembre, han condicionado negativamente el ejercicio. Por su parte, la cifra total de UTIs registrada en el puertos seco madrileño se situó en 35.615, frente a las 34.991 del año anterior, lo que representó un crecimiento del 1,5 por ciento.
De esa cifra total de UTIs, el mayor porcentaje correspondió a los contenedores de 40 pies (25.684). El tráfico de contenedores en la terminal ferroviaria madrileña tuvo su mejor noticia en la vuelta a la actividad del corredor con el puerto de Algeciras. “La frecuencia de dos trenes semanales entre Algeciras y Coslada se ha mantenido inalterada desde que se puso en marcha en el mes de julio e, incluso, ha soportado muy bien los dos últimos meses de desplome de actividad”, asegura Carlos Romero, gerente de Conterail, la sociedad concesionaria de la explotación del puerto seco de Madrid. Romero considera que, una vez que se supere la crisis económica actual, este corredor “nos va a dar un volumen de carga cada vez más significativo”.
En concreto, el corredor Algeciras-Madrid alcanzó un tráfico total de 91 trenes en el segundo semestre del año. Por otro lado, las conexiones con el puerto de Bilbao se resintieron a causa del significativo descenso en el tráfico registrado en los primeros tres meses de 2008. “La decisión de McAndrews de trasladar tráficos a la terminal del Adif de Madrid- Abroñigal durante el primer trimestre del año contribuyó al descenso en los tráficos, aunque en el resto de meses, la situación se ha vuelto a reconducir”, señala Romero. El número de trenes entre Bilbao y Madrid descendió un 20,2 por ciento en 2008, con una cifra total de 142.
Valencia volvió a ser líder en este apartado con una cifra total de 884 (+3,3%) y Barcelona registró un crecimiento del 18,3% (110 trenes), ayudada por una mayor apuesta por esta terminal. Por otra parte, Carlos Romero se muestra esperanzado con el inicio de actividad experimentado en el presente año. “Las previsiones apuntaban a que el mes de enero sería otro mes más de desplome, pero nos hemos sorprendido gratamente porque el mes está claro que no va a alcanzar los niveles de enero del pasado año, pero va a estar más cerca de lo que creíamos”, apunta Romero.