Atfrie propone la creación de un régimen sancionador contra los excesos en los tiempos de espera, en el marco de unos grupos de trabajo entre Comité y Administración que “no avanzan”.
El transporte de mercancías por carretera achaca una más que evidente inacción por parte del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible en relación con los temas que afectan al sector. Y es que los grupos de trabajo entre sector y Administración “no avanzan”. Así se puso de manifiesto en el marco de la XLVII Asamblea General de la Asociación Española de Empresarios de Transportes Bajo Temperatura dirigida (Atfrie), celebrada en Valbuena de Duero (Valladolid).
“Desde junio de 2023 estamos asistiendo a la paralización de los grupos de trabajo”, señaló Carmelo González, presidente del Comité Nacional de Transporte por Carretera. Para González, “hay interlocución con el Ministerio de Transportes, pero no avanzamos”, lamentó. “Llevamos año y medio sin avanzar absolutamente nada”, se sumó Ovidio de la Roza, presidente de CETM, que recalcó la preocupación del sector por “la inacción del Ministerio”.
Precisamente en el seno de estos grupos de trabajo, la patronal del transporte frigorífico está haciendo hincapié en que se compensen las horas de espera en la carga y descarga. “En España está legislado que hay que compensarlas a partir de la primera hora de la cita”, según recordó Pedro Conejero, vicepresidente de Atfrie. “El Comité tiene que trabajar para que esa norma conlleve aparejado un régimen sancionador”, ya que “se trata de un problema serio”, insistió Conejero. “Estamos en ello”, reconoció González. “La hora de paralización tiene un coste que no se está aplicando”, admitió.
Por su parte, el presidente de Atfrie, José María Arnedo, alzó la voz para denunciar la situación de inseguridad que viven los conductores de camiones, “con episodios gravísimos experimentados por empresas de la asociación en sus propias carnes en los últimos meses”. En este sentido, “no podemos soportar seguir perdiendo a nuestros conductores en las carreteras”, afirmó.
Al mismo tiempo, Arnedo avanzó que su organización va a ir más allá de la interlocución con el Gobierno español a través del Comité y teniendo en cuenta que muchas de sus empresas cada vez están más integradas en Marruecos, “hemos decidido que tengamos gente allí que nos pueda defender”. Atfrie también considera clave insistir en que el intercambio de palés está incluido dentro de la prohibición de la carga y descarga por parte de los conductores aprobada por el Gobierno. “El palé está incluido y eso es algo a tener en cuenta a la hora de negociar con los cargadores”, advirtió Conejero.
Carlos Prades, presidente de FVET, puso el foco en la falta de conductores profesionales y llamó la atención sobre la necesidad de promover la política del esfuerzo, “que está desvirtuada”. Además, hizo autocrítica para el sector al reconocer que en ocasiones no se aplican las cláusulas de recargo del combustible o que “regalamos el tiempo a nuestros clientes y el tiempo es dinero”.
El secretario técnico de Fetransa, José Carlos López Jato, reflexionó sobre el futuro de un sector en el que “los costes ya no los definirán los tiempos de conducción, sino los tiempos de trabajo”. El directivo de Fetransa se posicionó a favor del sistema de módulos en el transporte por carretera, ya que “de los 270.000 camiones que hay en España, los módulos solo afectan a 27.000”. En este sentido, “pediremos prórroga para el año que viene”, anticipó.
El presidente de Fenadismer, Julio Villaescusa, destacó que el sector en España cuenta con protección jurídica suficiente, por “eso somos unos privilegiados” en relación con otros países de nuestro entorno. No obstante, “la clave es cómo utilizamos esa protección jurídica”. Para ello, “no hay más remedio que insistir en la inspección y en la denuncia”, subrayó.
Juan José Arnedo, vocal de la junta directiva de Atfrie, lamentó la ausencia de primeros espadas del Ministerio de Transportes en las últimas asambleas y congresos de CETM, Astic y Atfrie. “Pero ya los veremos en las de Aecoc”, ironizó.
Por su parte, la directora general de Transportes de Castilla y León, Laura Paredes, reconoció que, según diferentes estudios, en su región faltan 2.000 conductores profesionales. Por este motivo, el Gobierno regional ha aprobado ayudas para obtener el carné de conducir vehículos pesados y el CAP de hasta 1.800 euros por persona.
Exportar el modelo
Conseguir prohibir la carga y descarga por parte de los conductores, así como el intercambio de palés, “es una medida que queda algo coja si no se consigue extenderla al ámbito europeo, especialmente en países como Francia y Alemania”, señaló Pedro Conejero. “Es importante conseguir aplicar en Europa la legislación que tenemos en España, porque allí nos envidian”, matizó Julio Villaescusa.
Por su parte, Diego Buenestado, secretario de Carreteras de UGT, aprovechó su intervención para hacer “el anuncio de que en la última semana de octubre vamos a convocar una huelga general de trabajadores de transporte para reclamar la jubilación anticipada”. El responsable sindical incidió en que “no es una huelga contra las empresas y nos gustaría ir de la mano con ellas en este tema, porque lo que queremos es el Gobierno tome medidas”.
En este contexto, Buenestado abrió la puerta a que se incorporen conductores procedentes de terceros países. Un guante que recogió el director técnico de Astic, José Manuel Pardo, que se congratuló de que los sindicatos se muestren receptivos a relacionar la jubilación anticipada con la contratación de trabajadores extranjeros. “Nos gustaría que el sector entrase en el catálogo de profesiones de difícil cobertura, en el que no estamos por culpa de los sindicatos”, resaltó Pardo.
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