Según cifras provisionales, el puerto de Amberes movió 158 millones de toneladas en 2009, lo que representa un descenso del 16,7 por ciento con respecto a 2008. El tráfico de contenedores en TEUs cayó un 16 por ciento debido al deterioro de las rutas entre Europa y Asia, y al descenso del 27 por ciento en los tráficos con EE.UU. (punto fuerte tradicional del puerto belga).
La naviera MSC, primer cliente del puerto, no cerró ninguna línea, y sí consolidó algunos servicios. Hay que señalar que entre enero y septiembre, Amberes obtuvo el mejor resultado de Europa entre capacidad ofertada y volumen transportado en contenedores (53 por ciento, mientras la media europea asciende al 39,7 por ciento). “Por tanto, la mercancía sigue ahí, lo que es un punto fuerte”, señala Eddy Bruyninck, administrador del puerto.
El ro-ro cayó un 28 por ciento (3,2 millones de toneladas), y la carga general retrocedió un 18 por ciento (en este segmento, la carga convencional cae un 40 por ciento). El tráfico de graneles disminuyó un 46 por ciento (57,3 millones de toneladas), siendo el carbón (-36 por ciento) y los minerales (-65 por ciento), los más afectados.