Las ayudas públicas para reactivar el sector de la automoción se han empezado a notar en las dos terminales especializadas de vehículos del puerto de Barcelona, Setram y Autoterminal, afectadas de lleno por el parón de la actividad en las plantas de Seat y Nissan y que han tenido que aplicar en 2009, como las fábricas de automóviles, expedientes de regulación de empleo temporales.
Tras un inicio de annus horribilis, con caídas superiores al 60 por ciento en el primer trimestre de 2009 -hasta del 78,7 por ciento en enero-, desde septiembre esta sangría se moderó y noviembre se ha saldado con un resultado positivo, 52.278 vehículos movidos, lo que representa un incremento del 15 por ciento en relación con el mismo mes de 2008. Se trata de la primera vez que este tráfico, estratégico para el puerto de Barcelona, crece desde junio de 2008. Eso sí, en comparación con el mismo mes de 2007, por la dársena pasaron el último noviembre 28.563 vehículos menos.
A falta de contabilizar el último mes del año, Barcelona ha movido 392.385 vehículos hasta noviembre, frente a los 675.061 del mismo periodo de 2008, lo que supone un retroceso del 41,87 por ciento. Más del 80 por ciento de este tráfico ha sido exterior (330.478 unidades), que ha bajado el 44,76 por ciento. El peor parado ha resultado el transbordo (64.876 unidades), con un descenso del 64,37 por ciento, es decir, casi 118.000 vehículos menos que hasta noviembre de 2008.
La exportación (183.112 vehículos) ha caído el 39,95 por ciento, mientras que la importación (82.490) ha retrocedido el 25,82 por ciento. El tráfico de cabotaje, básicamente con Baleares, ha bajado el 19,41 por ciento, hasta los 61.907 automóviles. El 2008 ya finalizó con un descenso del 10,62 por ciento de este tráfico, frente a crecimientos superiores a los dos dígitos de años anteriores.