Para Tránsito, las prohibiciones a camiones “están completamente fundamentadas”.
La patronal catalana del transporte ha recurrido las restricciones a la circulación de camiones de 2010, y es la tercera vez consecutiva que acude a los tribunales. Ni están justificadas ni el Servicio Catalán de Tránsito tiene las competencias para promulgarlas, según la Cetcat. “Están completamente fundamentadas”, asegura el director general de Tránsito
De perdidos, al río. Eso debe de pensar la patronal catalana del transporte por carretera, la Cetcat, que, por tercer año consecutivo, ha recurrido las restricciones a la circulación de camiones de 2010, fijadas por el Servicio Catalán de Tránsito de la Generalitat. Los argumentos para la impugnación son los mismos que en 2008 y en 2009, todavía sin respuesta judicial: ni están justificadas en número y extensión ni Tránsito es competente para promulgarlas ya que se trata de una materia que el consejero de Interior no puede delegar en el citado organismo, a juicio de la Cetcat.
“Las prohibiciones son las mismas en 2010 que en los dos años anteriores y, por lo tanto, hemos ejercido el derecho que tenemos de emprender acciones legales para defender los intereses de nuestras empresas. Además, es la única opción que nos queda”, señalaron fuentes de la patronal. Para el sector, es especialmente incomprensible la prohibición de circulación en determinados días y franjas horarias en toda la AP-7, en ambos sentidos, que atraviesa Cataluña y es la principal vía de comunicación con Francia. “Los problemas de movilidad se dan en puntos muy determinados, no en toda la autopista”.
Para Tránsito, las prohibiciones “están claramente fundamentadas por seguridad y para garantizar la movilidad de los vehículos privados”, señaló Josep Pérez Moya, director general de Tránsito, a este periódico. Desde que la patronal recurrió por primera vez las restricciones, Tránsito no ha convocado a las asociaciones para negociar ni las de 2009 ni las de 2010. Ello es debido al enfado de Pérez Moya, que públicamente ha dicho que no volverá a negociar con el transporte hasta que no retire las impugnaciones. “Y lo está cumpliendo a rajatabla”, añadieron desde la Cetcat.
Tránsito se ha limitado “a convocarnos una vez al año para informarnos exclusivamente de las restricciones del siguiente”. “Nunca he estado cerrado a la negociación”, aseguró Pérez Moya. Ahora bien, “debe estar basada en un principio de lealtad y no entendemos que no nos avisaran que recurrirían cuando cada parte habíamos llegado al límite de lo que podíamos”, añadió Pérez Moya, en referencia a las negociaciones para las restricciones de 2008. “Sólo nos comprometimos a no criticar públicamente las prohibiciones, no a renunciar al único derecho que nos quedaba”, puntualizaron desde la Cetcat.