El sector coincide en la cumbre de la CEOE en la necesidad de mantener el tejido empresarial y el empleo
La CEOE organizó en tiempo récord una megacumbre empresarial con los primeros espadas de todos los sectores para analizar la situación creada por la pandemia. El objetivo era claro: proponer medidas para la reconstrucción de la economía de España, muy castigada por el Covid-19, y trazar la ‘hoja de ruta’ para el crecimiento.
El transporte, pieza clave para potenciar la competitividad de la industria, también tuvo su espacio. Todos los protagonistas de este bloque coincidieron, con matices, en la necesidad de mantener el tejido empresarial y el empleo, para lo que reclaman flexibilidad laboral, ampliar los ERTE, liquidez financiera, seguridad jurídica y una política fiscal adecuada, entre otras medidas dirigidas a garantizar la viabilidad de un sector tocado, con muchas empresas en “modo supervivencia”. También surgieron propuestas interesantes como la de aprovechar la estratégica posición de España para el desarrollo de una plataforma logística mundial, lo que podría ayudar a captar inversiones en un sector que genera riqueza y crea empleo. Este es el camino. Iniciativas constructivas y no la amenaza de un paro en la carretera, que no se entiende en la actual coyuntura. Puede estar más que justificado el cabreo de este colectivo, en situación límite, al que ha dejado atrás el Gobierno y el propio ministro del ramo, José Luis Ábalos, pero un cierre patronal no conduce a ningún sitio. El titular de Transportes anunció la convocatoria este mes de una mesa de negociación con transportistas, cargadores y logísticos para abordar los retos de la próxima década. ¿Por qué no dar una oportunidad a esta vía?