El Ayuntamiento de la capital activa un grupo de trabajo para agilizar la distribución urbana.
El Ayuntamiento de Bilbao ha puesto en marcha un grupo de trabajo para abordar la problemática de la distribución urbana, que en el caso de la capital vizcaína supone la entrada diaria a la ciudad de cerca de 17.000 vehículos, entre furgonetas y camiones. El consistorio considera prioritario agilizar la operativa para reducir los actuales problemas de tráfico y movilidad
El Ayuntamiento de Bilbao lidera un grupo de trabajo para agilizar la distribución urbana de mercancías, uno de los principales retos de las grandes ciudades, consciente de su incidencia en el tráfico y la movilidad. Los datos facilitados por el consistorio son demoledores. En el caso concreto de la capital vizcaína, el transporte de mercancías conlleva la entrada diaria en la ciudad de cerca de 17.000 vehículos, entre furgonetas y camiones, que, utilizan entre 15 y 30 minutos en realizar la descarga en el 42 por ciento de los casos.
Un enorme caudal de actividad que ha llevado a los gestores del tráfico urbano a sentarse en una mesa con los representantes del pequeño comercio, grandes superficies y empresas de transporte para buscar soluciones que permitan mejorar el ‘reparto de última milla’. El propio concejal delegado adjunto de Circulación del Ayuntamiento de Bilbao, Asier Abaunza, reconoció que “somos conscientes de que tenemos un problema y aspiramos a conseguir una logística urbana ágil y sostenible”.
Esta preocupación quedó patente en el VIII Encuentro Ciudadano con la Movilidad, organizado por el Ayuntamiento de Bilbao y el RAC Vasco- Navarro, que eligió como tema central la ‘logística urbana en el transporte’. En la jornada participó Ibán García de Andoin, de Transportes Azkar, que apuntó como soluciones para agilizar la distribución urbana la posibilidad de permitir la entrada a las ciudades de “camiones grandes de dos y tres ejes” para optimizar las cargas, así como un “dimensionamiento adecuado de las plazas de carga y descarga” y “una mejor distribución” de las mismas.
No en vano, las infracciones más corrientes detectadas en las operaciones de carga y descarga son los estacionamientos en doble fila (32 por ciento), y dejar los vehículos en una esquina (13 por ciento) y en pasos de peatones (10 por ciento). Como principales problemas, García de Andoin destacó la poca estabilidad en las entregas y la baja ocupación de los camiones, que realizan recorridos relativamente cortos, con muchas paradas, lo que dispara los costes.