Ni bonificaciones del 40 ni del 60 por ciento. Gratuidad total para los camiones que circulen por la autopista de peaje AP-7 mientras no esté hecho el desdoblamiento de la carretera N II a su paso por Gerona. Es una reclamación que hizo hace un año la patronal del transporte Asetrans y que ahora vuelve a pedir con más ahínco, si cabe, ante el proyecto de prohibir la circulación de vehículos pesados por la N II que no tengan su origen o destino en la provincia.
El Ministerio de Fomento, la concesionaria Abertis y la Generalitat negociaban, al cierre de esta edición, qué descuentos aplicar a los camiones que pasen por la AP-7 entre Gerona y la frontera (La Jonquera), una vez se prohiba la circulación de estos vehículos por la carretera nacional. “Estamos de acuerdo en que los camiones circulen obligatoriamente por la autopista, pero debe ser gratuita”, señala Carles Palacio, secretario general de Asetrans.
La organización transportista está molesta porque ha recibido la callada por respuesta a la petición que ha hecho al Ministerio de Fomento de participar en las negociaciones con Abertis y la Generalitat. “Somos parte directamente afectada y no nos han consultado nada. Nos tienen que tener en cuenta si van a obligar a los camiones a pasar por la AP-7”, añade Palacio.
Ante la elevada siniestralidad que registra la N II a su paso por Gerona, el Ministerio de Fomento y el departamento de Territorio y Sostenibilidad han acordado prohibir la circulación de camiones por la carretera nacional de forma transitoria, mientras no se complete el desdoblamiento de la N II, lo que puede tardar años a tenor de la marcha de las obras. Alrededor de 4.000 camiones al día pasan por la N II. El grueso del transporte internacional que cruza la frontera va por la autopista de peaje AP-7, por donde circulan 10.000 camiones diarios.