El presidente de Astic, Marcos Basante, advierte de que “no hay una alternativa tecnológica eficiente a los motores actuales” y reconoce que “vamos a tener que hacer algo para compensar las emisiones”.
“El transporte por carretera tiene que dejar de ser el actor secundario para convertirse en protagonista”. Así de contundente se mostró el presidente de Astic, Marcos Basante, en la Asamblea General de la Asociación del Transporte Internacional por Carretera, celebrada el pasado 27 de mayo en el Palacio de la Magdalena de Santander, que regresó al formato presencial después de dos años, debido a las restricciones de la pandemia.
El encuentro, bajo el título ‘Transporte por Carretera. Con los 5 sentidos’, sirvió para repasar la actualidad del sector, que “comienza una nueva etapa marcada por un nuevo marco legal que equilibra el ‘terreno de juego’ con sus clientes y por el impulso de la transición digital y energética de sus empresas”.
El presidente de la patronal, en este sentido, puso en valor los recientes acuerdos alcanzados entre el Comité Nacional y el Gobierno. “Estamos cambiando el paradigma en la relación con nuestros clientes”, destacó Basante. “Las relaciones que había antes han cambiado radicalmente. Los cargadores se han dado cuenta de que los transportistas somos una parte de ellos”, puntualizó.
En cuanto a la transformación energética, una de las grandes protagonistas de la jornada, el máximo responsable de la organización empresarial también fue muy claro. “El transporte de mercancías por carretera en los próximos años no se va a mover con otro combustible que no sea gasóleo”. Sin pelos en la lengua, Basante aseguró que “lo que nos están ofreciendo en este momento es un tema de transición, vender un progreso que es imposible que sea cierto y asequible”, y no le dolieron prendas al reconocer que “vamos a tener que hacer algo para compensar las emisiones”, ante la “falta de una alternativa tecnológica eficiente a los motores actuales”.
En la misma línea se pronunció el vicepresidente ejecutivo de Astic, Ramón Valdivia, tras recordar que “nuestro sector lleva más de una década invirtiendo en vehículos de mayor eficiencia energética, formación de conducción económica y tecnologías de mejora de planificación de rutas para minimizar tiempos muertos y recorridos en vacío”. Valdivia subrayó que “el gas natural y los ecocombustibles son las únicas energías ‘verdes’ viables” para recorrer el camino de la descarbonización “sin destruir ni puestos de trabajo, ni nuestra competitividad”. Por ello, añadió, “nuestro enfoque debe ser realista, contemplando un mix energético y no imponiendo una única tecnología”. Así las cosas, “el ‘Fit for 55’, que prevé la eliminación de la venta de camiones con motor de combustión interna en 2050, permitiendo solo vehículos con baterías eléctricas, nos parece inasumible”, sentenció.
El propio vicepresidente de Mercancías de Astic, Juan Jesús Sánchez, tras confesar que “somos proactivos” en la apuesta por la sostenibilidad, advirtió de que “lo que necesitamos es la tecnología, las infraestructuras y seguridad jurídica para acometer las inversiones”.
La clausura de la Asamblea General corrió a cargo del director general de Transporte Terrestre del Mitma, Jaime Moreno, que también reconoció que “la parte ambiental pesa mucho, con unos objetivos muy ambiciosos. Tenemos que ver la manera más eficiente de alcanzarlos y encontrar la solución buena”.
Durante su intervención también puso en valor los acuerdos alcanzados con el Comité Nacional. “Nos da unas herramientas para equilibrar unas relaciones asimétricas y nos permite crecer a todos”.
De cara al futuro, se mostró “optimista”, pese a que se está viviendo una “época convulsa”. Moreno apuntó que “la demanda de carga va a seguir creciendo, estamos en un entorno positivo”. Eso sí, reiteró que “esto no lo es todo. Tenemos esos compromisos ambientales que lo van a tensionar todo y tenemos que ver la manera de cómo transportar más, siendo más eficientes en cuanto a emisiones, contar con todas las tecnologías y sacar lo mejor de ellas”.
Tampoco pasó por alto el problema de la escasez de conductores e insistió en la necesidad de “hacer más atractiva la profesión y compaginar la vida laboral y familiar”.
Por último, el director general de Transporte Terrestre hizo un sentido reconocimiento al sector, por su “importancia estratégica”, e insistió en la importancia de “trabajar juntos. Hay retos muy importantes y solos no los vamos a conseguir”, concluyó Moreno.
Más información en la próxima edición en papel de Transporte XXI.