La actual Continental Automotive abusó de su posición en el sector de los tacógrafos.
El Tribunal Vasco de Defensa de la Competencia ha multado con 700.000 euros a Continental Automotive Spain, antigua Siemens VDO, por abuso de posición dominante en la formación sobre tacógrafos. Continental negó los cursos de reciclaje a un taller, lo que provocó que éste perdiera la autorización para instalar los aparatos
El Tribunal Vasco de Defensa de la Competencia ha sancionado a la empresa Continental Automotive Spain con una multa de 700.000 euros por cometer un abuso de posición dominante en el mercado de la formación sobre normativa, instalación y control de tacógrafos analógicos. El expediente tuvo su origen en una denuncia presentada contra la empresa Siemens-VDO Automotive (actualmente Continental Automotive Spain) por un taller vizcaíno dedicado a la instalación, reparación y mantenimiento de tacógrafos, actividad que sólo puede ser desarrollada por establecimientos provistos de una autorización administrativa expedida por el departamento de Industria y Comercio del Gobierno Vasco.
Para la obtención de la citada licencia administrativa o para su renovación cada tres años, el personal de los talleres debe recibir obligatoriamente cursos de formación o reciclaje dirigidos a actualizar sus conocimientos técnicos en la materia. La normativa vigente establece que sólo el fabricante de los aparatos o su representante oficial pueden impartir este tipo de formación, según señala el texto del organismo supervisor vasco.
Continental Automotive Spain, con sede en Madrid, denegó “sin justificación objetiva alguna” el acceso a los cursos de formación a la empresa vizcaína. Como consecuencia de esta negativa, el taller, que ofertaba este servicio desde 1985, perdió la autorización administrativa que tenía, dejando de trabajar en el mercado de la instalación y el mantenimiento de tacógrafos analógicos de la marca Siemens-VDO, que en Vizcaya es claramente dominante “si atendemos al porcentaje de intervenciones, el 90 por ciento del total, que se realizan en los diferentes talleres que disponen de autorización administrativa para ello”.
Por ello, el Tribunal considera que Continental Automotive ha cometido una infracción a la Ley de Defensa de la Competencia al “abusar de su posición dominante en el mercado de la formación, una posición que ha obtenido gracias a la normativa vigente y que debe gestionar con especial responsabilidad”. La actuación de Continental Automotive “constituye un acto abusivo contrario al derecho”, concluye la sentencia.