El túnel de baja cota del Pirineo Central que promueve la UE no estará listo antes de 2035.
Empresarios españoles y franceses han reiterado su interés en que se vuelva a poner en marcha la conexión ferroviaria Pau-Canfranc-Zaragoza, interrumpida hace casi 40 años. Esta línea estaría operativa hasta que se ponga en marcha el túnel de baja cota del Pirineo Central, que promueve la UE, y que no estará activo antes de 2035
El Comité de Redes de la Unión Europea, que integran la Comisión Europea y los 25 estados miembros, aprobó recientemente la propuesta de financiación presentada por el comisario de Transportes de la Comisión Europea, Jacques Barrot, que incluía la realización de los estudios pertinentes para la construcción de un túnel de baja cota que atraviese el Pirineo Central. De esta manera se daba impulso definitivo a la futura puesta en marcha de una línea ferroviaria de gran capacidad que conectará España y Francia a través del Pirineo Central. La financiación de estos estudios, solicitada por los estados de Francia y España, se elevará inicialmente al 50 por ciento del montante previsto para los mismos, que rondará los 10 millones de euros, según aseguró el comisario Barrot.
La noticia, recibida con gran alborozo tanto por la Administración regional como por parte del empresariado aragonés, se plantea en todo caso como una solución a medio o largo plazo. Fuentes consultadas por este periódico citan la puesta en marcha de la citada travesía central de los Pirineos en el entorno del año 2035. Esta situación ha provocado que siga adelante la solicitud, tanto por parte del empresariado de la región francesa de Aquitania como del empresariado aragonés para que se ponga de nuevo en marcha la línea ferroviaria que conecta Pau-Canfranc-Zaragoza. Recientemente, el gobierno regional de Aquitania acordó iniciar las obras de acondicionamiento y modernización de parte del tramo francés.
Estos trabajos, que se acaban de iniciar hace tan solo unos días, estarán concluidos en el curso de 2010 y representarán una inversión total cercana a los 60 millones de euros. Las fuentes consultadas por este periódico cifran en escasamente 30 kilómetros el tramo de vía que quedaría por acondicionar en ese momento para completar el trazado definitivo de la conexión y recuperar de esta forma el tráfico internacional de la misma. Además, consideran que los tráficos ferroviarios de mercancías que se vayan incorporando en estos años previos a la puesta en marcha del túnel de baja cota justificarán aún más la puesta en servicio de éste.
Por otro lado, la patronal oscense del sector del transporte ha reconocido públicamente que la puesta en marcha del proyecto de travesía del Pirineo Central, que ellos apoyan, no debe hacer olvidar las necesidades actuales en materia de carreteras en esta zona. La actual carretera que une Aragón con Francia, a través del túnel de Somport, se encuentra en unas condiciones precarias, según los transportistas, ya que tanto la infraestructura como su mantenimiento son deficientes. Las obras de reacondicionamiento de esta carretera deberían haberse concluido hace ocho años, según los transportistas.
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