Asegura que los recursos son insuficientes, no prioriza inversiones, omite un análisis de coste/beneficio en cada proyecto y mantiene partidas de gasto corriente improductivo.
La CEOE ha presentado una enmienda a la totalidad al plan de Infraestructuras y Transportes de la ministra Pastor. En un informe al que ha tenido acceso TRANSPORTE XXI, asegura que los recursos son pobres, no prioriza inversiones, omite un análisis de coste/beneficio en los proyectos y mantiene gastos corrientes improductivos
La CEOE ha echado por tierra el Plan de Infraestructuras y Transportes (PITVI) elaborado por Fomento para el período 2012-2024, cuyas actuaciones están presupuestadas entre 119.720 y 144.826 millones de euros, dependiendo del escenario económico, lo que supondría un 0,80 por ciento del PIB. En un informe de alegaciones y propuestas elaborado por la Comisión de Infraestructuras y Urbanismo de la patronal al que ha tenido acceso TRANSPORTE XXI, la CEOE no se ahorra frases muy críticas a la hora de valorar el plan de Fomento. En relación a los recursos definidos para su financiación, asegura que “son claramente insuficientes.
La inversión resulta escasa en relación al PIB para la consecución de los objetivos que plantea el PITVI, siendo muy inferior a la de los países de nuestro entorno económico”. La planificación “no desciende al detalle (…) y no define los criterios de selección y priorización de inversiones. Y en la conservación del patrimonio no detalla ningún programa ni compromiso de actuación”. En el capítulo de la colaboración público-privada (CPP) para la construcción de infraestructuras, la patronal de Rosell alega que este instrumento “ha ido decreciendo”, por lo que “es absolutamente necesario adecuar el actual marco legal para posibilitar la captación de recursos financieros mediante la CPP”.
Con el objetivo de aumentar los recursos destinados al PITVI, la organización plantea a Fomento una “racionalización de gasto público”, argumentando el mismo con un párrafo demoledor: “Procede una reducción de partidas destinadas a gasto corriente improductivo y la desviación de esos fondos hacia partidas concretas para el mantenimiento y conservación de las infraestructuras”. Para garantizar que las inversiones cumplan los objetivos del PITVI, propone que “es indispensable la elaboración obligatoria de un análisis de coste/beneficio en cada proyecto, de manera que permita compararlos según su eficacia económica y social para establecer prioridades”.
En su opinión, “es necesaria la inclusión en todos los proyectos de un estudio de factibilidad económicofinanciera para identificar los contratos que pueden llevarse a cabo en régimen de concesión y aquellos otros que, sin tener asegurada su factibilidad financiera, pueden llegar a ser concesionables con ciertas aportaciones previstas en la Ley”. Por otro lado, el informe de la CEOE, en cuya redacción también ha participado el Consejo de Transporte y Logística de la organización, dedica un capítulo especial al transporte de mercancías por carretera. En este actividad “echa en falta una concreción presupuestaria sobre las iniciativas relativas a la construcción y desarrollo de los nodos intermodales, así como la mejora de los accesos terrestres a los mismos, que puedan dar cobertura a la colaboración entre el transporte terrestre, marítimo y aéreo, facilitando así el desarrollo del principio de la comodalidad y el intercambio modal”.
Además, añade que “es necesario establecer una dotación presupuestaria que agilice de forma racional el diseño y la construcción de un mapa de áreas de descanso seguras, acondicionadas para las necesidades de los transportistas profesionales, donde puedan cumplir con los descansos obligatorios marcados por la normativa europea, sin temor a ser robados o agredidos por las bandas de delincuentes”.
Por último, dada la precariedad presupuestaria a raíz de la reducción de ingresos, “conviene adoptar medidas complementarias de bajo o nulo coste para la Administración y los contribuyentes, que favorezcan la utilización racional de las infraestructuras y la amortización de las inversiones”. En este sentido, concluye la CEOE, “se debe acometer una política de racionalización de las restricciones genéricas al tráfico de mercancías, establecidas a nivel nacional y en algunas CCAA que impiden el tráfico profesional en ciertas franjas horarias durante determinados días del año y que suponen graves ineficiencias para las empresas, un deterioro de las condiciones de trabajo para los conductores y una mayor concentración del tráfico, con los problemas de congestión y de carácter medioambiental que ello conlleva”. Para solucionar este problema, propone “establecer corredores libres de restricciones, abiertos al tráfico los 365 días del año”.