Director técnico y cofundador de Taric
“Las políticas económicas proteccionistas deforman el comercio internacional”
Enrique Miret Bernal, director técnico y cofundador de Taric, advierte de las graves consecuencias que puede acarrear en el ámbito aduanero las medidas de salvaguardia y derechos adicionales impuestas por determinados países. Para Miret, “las políticas económicas proteccionistas deforman el comercio internacional”, que es como una red en la que si rompes determinados elementos de la misma, los demás elementos se debilitan y ya no son tan fuertes”, alerta.
– El pasado 1 de julio se celebró el 50 aniversario de la unión aduanera en la UE, uno de los grandes hitos del proyecto comunitario. ¿Qué supuso su puesta en marcha?
– La unión aduanera representa muchas cosas, pero la fundamental es la apuesta arriesgada de un grupo de países por unirse. Eso es algo revolucionario con respecto a otras partes del mundo. Ha sido un impulso al desarrollo económico y ha permitido utilizar el comercio de una forma mucho más racional. Es un magnífico ejemplo, aunque ahora vemos que todo esto que se va construyendo también se puede destruir, desgraciadamente.
– ¿Cuáles son los principales retos que quedan por afrontar?
– En el ámbito aduanero ha habido una revolución fundamentalmente apoyada en el desarrollo de las herramientas informáticas. Queda por hacer, pero se está muy cerca de contar con unos sistemas informáticos que permitan tener unos procedimientos comunes. El reto pendiente es que haya procedimientos comunes desde el punto de vista aduanero, pero también paraduanero, es decir, todas esas cuestiones que no dependen estrictamente de las autoridades aduaneras.
– El 1 de mayo de 2016 entró en vigor el nuevo Código Aduanero de la Unión (CAU). ¿Cuáles son las principales novedades?
– Desde el punto de vista procedimental, muchísimas. Desde el punto de vista de unión aduanera, es el soporte legal para que sea posible. Una apuesta enorme por el uso común de las herramientas informáticas, así como el poder confiar en los operadores, y no tanto en que la Administración esté en constante vigilancia, siendo operadores de confianza.
– El 1 de mayo de 2019 finaliza el programa de reevaluación de todas las autorizaciones aduaneras concedidas a los operadores. El objetivo de la Aduana es evaluar el grado de cumplimiento del CAU. ¿Se han definido ya con claridad los procedimientos que han de seguir los operadores para cumplir la ley?
– En general, podemos decir que están bastante definidos, pero operativamente, tanto los operadores como las administraciones tienen que interpretar y gestionar. En este camino están trabajando muy intensamente tanto los operadores con sus dudas y sus preguntas, como las administraciones para poder tener unos procedimientos mucho más claros.
– Pero sigue habiendo incertidumbre entre los operadores.
– La sigue habiendo, pero cada vez se va aclarando más, como digo, con el propio trabajo de los operadores, de la gente que ayuda a los operadores en todos estos procesos y de la propia Administración.
– Dentro del proceso de reevaluación se encuentra la autorización de OEA. ¿Tiene datos actualizados?
– Las reevaluaciones iniciadas sobre el total a realizar por mor del CAU alcanzan el 85 por ciento, mientras que las acabadas suponen el 55 por ciento. Han sido revocadas una treintena. Estamos mejor que la media de iniciadas en la UE, que no supera el 65 por ciento.
– ¿Por qué motivos se están revocando autorizaciones OEA?
– El tema de la solvencia financiera, por ejemplo, es una de la cuestiones que ha provocado más controversia, porque ha habido mucha más definición de cómo se debe controlar todo el tema de las garantías sobre las operaciones.
ADUANAS
Estoy de acuerdo en que en España hay unas aduanas que son más ágiles que otras
– ¿Se han empezado a notar los beneficios del CAU o aún es pronto?
– Hay que tener en cuenta que esto es un proceso transitorio en el que se podría hablar de una especie de caos ordenado. Globalmente, la percepción que tiene el mercado es todavía muy incierta y probablemente la puesta en marcha de determinados procedimientos hasta que sean refinados contribuye a ello. La sensación es que los beneficios todavía están por llegar. Nosotros somos bastante optimistas en que, aún con muchas imperfecciones, el camino emprendido es fundamental para reforzar la Unión Europea.
– La CE recomienda a los Estados miembro que la aplicación del CAU se realice con un planteamiento pragmático y favorable a las empresas. ¿Está siendo así en España?
– La intención claramente es esa. El ejemplo del OEA sí va en ese orden y es conseguir que la propia empresa pueda llegar hasta unos extremos que eran impensables hasta ahora y que pueda ser parte de la aduana. Se persigue que el operador se autoevalúe, se autocertifique e incluso se autoliquide los derechos que tiene que pagar. En definitiva, el CAU sí va más orientado en ese sentido al mundo de la empresa, como parte integrante de todo lo que son los procesos aduaneros y paraduaneros.
– Los operadores de Barajas reclaman una aplicación del CAU más flexible y ponen como ejemplo el aeropuerto de Schiphol en Ámsterdam, en el que una interpretación menos rígida de este código está facilitando el tráfico de mercancía del sector del comercio electrónico.
– El CAU tiene el mandato de entender lo que es el comercio alternativo, el comercio virtual. El que Schiphol en aéreo o el puerto de Róterdam en marítimo hayan sido siempre más avanzados en estos temas tiene que ver con una mentalidad comerciante que viene del siglo XVI. Ellos tienen otros métodos porque la ligereza del paso por fronteras es importantísima, bien es verdad que eso tiene sus riesgos. Lo de Schiphol lo incluiría más en el concepto de mentalidad y no tanto por el CAU, sino que podríamos decir que es ancestral.
– Entre los principales retos de la Unión Aduanera se encuentra la ‘ventanilla única’. ¿Un sistema aún en fase de pruebas?
– La ventanilla única se encuentra ante la necesidad imperiosa de dar el siguiente salto. Nos parece una experiencia primera interesantísima. Llevan unos dos años desde que empezaron los pilotos, pero hace falta dar el siguiente paso, que debe ser una ventanilla única de declaraciones en la que el operador pueda declarar la información en un único sitio centralizado.
VENTANILLA ÚNICA
Hace falta dar el siguiente paso hacia una ventanilla única de declaraciones
– ¿Cómo la ve el sector?
– Los operadores actualmente no ven muchos beneficios. Está muy poco madura y hace falta otro golpe de efecto muy potente para que esto realmente pueda funcionar.
– ¿Nuestra Aduana tiene algo que envidiar a las de otros países?
– En algunas cuestiones, sí. Desde el punto de vista de los procedimientos informáticos es de las más avanzadas, pero también sabemos que hay otros países que para ciertas cuestiones son mucho más ágiles y prácticos.
– Hay quien sostiene que la pieza clave de la competitividad del comercio internacional de un país es la Aduana. ¿Lo cree así?
– No soy tan valiente para afirmar eso, pero lo que sí que podemos decir es que es una pieza fundamental. Si esa pieza no funciona, si no están bien resueltas las cuestiones frente a la aduana el comercio internacional cae.
– Empresas transitarias se quejan de que en España hay unas aduanas más ágiles que otras.
– Estoy de acuerdo. No obstante, desde el punto de vista ya no europeo sino local, todos los procedimientos están más normalizados e informatizados, por lo que esas diferencias cada vez son menores. Eso desde el punto de vista de aduana, porque en la ventanilla única y los procedimientos que todavía no están normalizados es posible que haya diferencias más importantes.
– ¿Qué le parece el repunte de las políticas económicas proteccionistas que están afectando también al ámbito aduanero con medidas de salvaguardia y derechos adicionales por parte de algunos países?
– Históricamente ha habido una tendencia favorable a entender que el mercado es global y que es necesario suprimir ciertas barreras que en muchos casos son absurdas. Vivimos en una comunidad, no en países aislados que se tienen que proteger para no desaparecer. El proteccionismo es regresión en todos los aspectos. Si el modelo ha sido válido para un crecimiento global, volver a ciertas propuestas proteccionistas responde a unos intereses poco plausibles.
– ¿A qué cree que responden?
– Sinceramente y es triste decirlo, responden a criterios propagandísticos. Algo que cuesta tanto construir, qué fácil es, para un fin no muy claro, empezar a poner barreras y provocar una regresión.
– ¿De qué calado es el daño?
– Deforma el mercado. El comercio internacional es una red. Si rompes determinados elementos de la red, los demás elementos se debilitan y ya no son tan fuertes.
– ¿Podrá recuperarse el mercado en el futuro de estas políticas?
– Posiblemente el peso de lo que se ha avanzado hará que lo que antes costaba muchos años se pueda recuperar más rápidamente, pero el paso atrás y el daño es terrible.
BREXIT
Va a ser trastornador para Europa y Reino Unido; va a influir enormemente en el tráfico de mercancías
– ¿Qué impacto puede tener el Brexit, con previsibles cambios en los controles aduaneros y posibles barreras arancelarias?
– Es una ruptura tan grande, que creo que hay muchísimo temor, incluso de las propias Administraciones. O hay un Brexit muy suave, aunque me temo que para cierta parte de la opinión pública del Reino Unido no sería aceptable, o si no va a ser muy trastornador no solamente para Europa sino para el propio Reino Unido. Son demasiadas cosas que son comunes, como procedimientos, sistemas, etc, que realmente va a influir enormemente en el tráfico de mercancías.
– Taric fue fundada en el año 1987. ¿Cómo surgió el proyecto?
– El proyecto surgió cuando éramos muy jóvenes, con la idea de ayudar en aquel momento en su empresa al padre de Guillermo Salafranca, cofundador y director general de Taric. A raíz de ahí, seguimos con el proyecto, buscamos financiación y nació Taric. Después de ocho meses de trabajo, creamos la primera base de datos de uso personal y empresarial que contenía un arancel de aduanas y que podía actualizarse. La idea era tener un arancel en el que se pudiera saber por adelantado y con previsiones qué derechos y tributos tenías que pagar todos los comienzos de año.
– La empresa está posicionada en el mercado de las soluciones globales para la gestión aduanera, así como en el suministro de información arancelaria y legislativa en el ámbito del comercio exterior. ¿Qué papel juega la formación?
– La formación es una salida natural de lo que ha sido una de nuestras señas de identidad, ya que conjuntamente con la creación de un producto siempre hemos dado soporte de asesoramiento sobre el mismo. En 2008, con la implantación de la figura del operador económico autorizado (OEA), entendimos que sería interesante que accediéramos a la información reglada. Transcurridos esos años hemos adquirido mucha experiencia, hemos realizado muchos cursos y realmente puedo decir que el nivel formativo en el tema de aduanas en estos años ha dado un vuelco.
– En agosto, Taric anunció un acuerdo de integración en el grupo de software logístico global Wise Tech. ¿En que fase se encuentra?
– La adquisición de la empresa por parte de Wise Tech ya está completada y el proceso de integración se va haciendo gradualmente.
– ¿Qué supone para Taric?
– La globalización nos toca a todos. Dentro del ámbito del comercio exterior, de los transitarios y de las herramientas que apoyan la gestión de esos transitarios también vivimos en un mundo global. Y Wise Tech ha tenido una línea en los últimos años de adquisiciones. La operación llegó en un momento en el que encajaba con nosotros. Sinceramente ha coincidido en un magnífico momento.
El personaje
Vida: Enrique Miret nació en Madrid en 1961. Apasionado de las motos clásicas; tanto en el plano personal como a través de Taric, siente gran interés por el arte. Así lo atestiguan las numerosas obras pictóricas que decoran las paredes de las oficinas centrales de la compañía en Madrid.
Obra: Realizó estudios de Económicas en las universidades Autónoma y Complutense de Madrid, así como de Matemáticas en la Universidad Complutense de Madrid. Es autodidacta en el ámbito aduanero, en el que ha desarrollado la totalidad de su trayectoria profesional desde que a temprana edad contribuyese a la creación y lanzamiento de Taric, compañía que después de 31 años de bagaje acaba de ser adquirida por el grupo internacional de empresas Wise Tech Global.
Milagros: ”Estudiando, analizando y compartiendo” ha disfrutado del proyecto de Taric desde el minuto cero, contribuyendo a impulsar la gestión aduanera en España.