Lo importante es que el convenio garantiza la financiación para los accesos
Ha habido solemnes actos institucionales de firmas con luz y taquígrafos que han ido a ninguna parte como los dos convenios suscritos por las administraciones afectadas para impulsar el desarrollo del acceso sur al puerto de Barcelona en junio del año 2016.
En esta ocasión, no ha habido luces ni taquígrafos y nos hemos enterado por el BOE que Óscar Puente, ministro de Transportes, Luis Pedro Marco, presidente del Adif, Álvaro Rodríguez Dapena, presidente de Puertos del Estado, y José Alberto Carbonell, presidente de la Autoridad Portuaria de Barcelona, firmaron el convenio para la financiación de los pendientes accesos terrestres, viarios y ferroviarios, a la dársena catalana el 26 de noviembre.
El propio ministro anunció en octubre que la firma de este convenio sería en un acto público el 15 de noviembre. El foco del Gobierno en las consecuencias de la DANA en Valencia pospuso la fecha.
Es completamente superfluo que el acto haya sido en la intimidad. Lo importante es el convenio que garantiza la financiación de la pendiente infraestructura. Como ya se sabía, los accesos terrestres suponen una inversión de 730,16 millones de euros, de los que el Ministerio de Transportes sufraga 263,82 millones, Adif aporta 266,34 millones y la Autoridad Portuaria financia los restantes 200 millones.
Las partidas están distribuidas en ocho anualidades, entre 2025 y 2032. Ello no quiere decir que las complejas obras se ejecuten en ocho años, ya que la vigencia del convenio se puede prorrogar siete años. Solo queda ponerse manos a la obra.
Eva Mármol
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