Reconoce el Gobierno en un informe sobre la estibadora pública Sesticarsa, inspeccionada 77 veces por Trabajo desde 2007.
El Gobierno, en un informe remitido al Congreso, reconoce “la existencia de un conflicto enquistado durante años” en el puerto de Cartagena, en el seno de la sociedad pública de estiba Sesticarsa que preside Viudes. La punta del iceberg de este conflicto son los dos millones que Sesticarsa adeuda a la Seguridad Social
La Sociedad de Estiba y Desestiba del Puerto de Cartagena, donde la Autoridad Portuaria que preside Adrián Viudes ostenta la mayoría con el 51 por ciento de las acciones, ha sido investigada en 77 ocasiones por la Inspección de Trabajo y la Seguridad Social desde 2007. Así consta en el informe que el Gobierno remitió el pasado 6 de marzo a la diputada Ascensión de las Heras (IU), al que ha tenido acceso TRANSPORTE XXI, que preguntaba sobre la conflictividad la boral en el puerto de Cartagena.
A la luz de estos y otros datos, el Gobierno reconoce que “existe un conflicto enquistado durante años (en el puerto de Cartagena) entre los trabajadores de la sociedad estatal, Sesticarsa y las distintas empresas estibadoras que lo conforman”. De estas 77 inspecciones en Sesticarsa, que emplea a 32 estibadores, cinco derivaron en la instrucción de actas de infracción y dos en actas de liquidación.
En este último caso, a día de hoy, Sesticarsa “mantiene una deuda con la Seguridad Social de 2,11 millones de euros” Ambos expedientes de liquidación, que la semipública que preside Viudes tiene recurridos en lo Contencioso- Administrativo, están basados “en diferencias en las bases de cotizaciones” de los trabajadores. El informe de la Administración del Estado asegura que “no se pueden estudiar las labores inspectoras llevadas a cabo sobre Sesticarsa obviando las que se desarrollan en las empresas estibadoras”, ya que “estas últimas son parte de aquélla”, en clara referencia a que son también accionistas.
En concreto, el 49 por ciento de Sesticarse que no está en manos del puerto se reparte entre Comylsa (18,4 por ciento), Ership (10,4 por ciento), Fletrans (7,20 por ciento), Viuda e Hijos de Francisco de Vera (cuatro por ciento), Manipulación de Mercancías (3,6 por ciento), Agencia Marítima Blázquez (2,7 por ciento), Bergé Marítima (1,2 por ciento), Terminal Marítima de Cartagena (1,1 por ciento) y Mantepuerto (0,4 por ciento). No obstante, Viuda e Hijos de Francisco de Vera, Comylsa y Fletran están son “estibadoras sin actividad que no venden (de manera alicuota) su participación a las demás (empresas privadas”).
En total, la Dirección General de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social ha realizado 207 actuaciones sobre Sesticarsa y sus accionistas privados, si bien la semipública que preside Viudes se lleva la palma, con el 37 por ciento de las mismas y las ya citadas actas de liquidación por valor de 2,11 millones de euros, seguida de Manipulación de Mercancías, con 54 actuaciones (26 por ciento). La mayoría de las inspecciones “se desarrollaron en los años 2007, 2008 y 2009. Según el informe de la Administración del Estado, lo mismo vale para “los 36 expedientes sancionadores y las cuatro propuestas de recargo en prestaciones derivadas de otros tantos accidentes de trabajo”.
ACCIDENTES DE TRABAJO
Además, gran parte de las inspecciones y las sanciones estuvieron motivadas “por la investigación de accidentes de trabajo con deficiencias en medidas de seguridad, conductas antisindicales declaradas en sentencia judicial, despidos, huelgas, denuncias acerca del inclumiento de los llamamientos mínimos a realizar por las estibadoras, ausencia de nombramientos de capataz y las puestas a disposición indebida de mano de obra”, añade.
“Esta conflictividad -continúa- ha ido unida al mantenimiento de la plantilla del personal especializado de Sesticarsa durante todo el período, pese al incremento de la actividad del puerto, operándose incluso algunos despidos”. Lo cierto es que la plantilla de Sesticarsa ha pasado de 53 trabajadores en 2006 a 32 estibadores a día de hoy, con una reducción del 40 por ciento.
En el mismo período, los graneles sólidos, que es el que negocio que más mano de obra demanda a Sesticarsa, ha descendido un 5,6 por ciento, pasando de 5,17 millones de toneladas a 4,88 millones. Por su parte, la carga general se ha mantenido en el millón de toneladas.