Fabricantes de semirremolques piden ampliar la dimensión de los vehículos

Reclaman más flexibilidad, aunque fuera sólo con el compromiso de añadir accesorios aerodinámicos y no para aumentar la carga.

La reducción del consumo de combustible no es sólo cosa del fabricante de los camiones, sino que la responsabilidad está repartida entre ellos, los neumáticos y, cómo no, los constructores de remolques y semirremolques, que reclaman a las autoridades europeas más flexibilidad para ampliar la dimensión de los vehículos

Bernard Krone, presidente del consejo de supervisión del holding germano del mismo nombre, fabricante de remolques y semirremolques, aceptó durante su intervención en la habitual reunión con la prensa especializada internacional previa al Salón de Hanóver, la parte de responsabilidad que tienen estos vehículos en la reducción del consumo.

Evidentemente, remolques y semirremolques se mueven acoplados a un remolcador o una tractora, conformando un conjunto articulado a cuyo peso y aerodinámica sí que contribuyen remolques y semirremolques. Por ello, los diseñadores de estos últimos hace mucho tiempo que dejaron de planteárselos como unos grandes cajones de mayor o menor altura. Por el contrario, trabajan en la búsqueda y la utilización de materiales cada vez más ligeros, al tiempo que recurren al método de los elementos finitos para diseñar estructuras de tara cada vez más reducida, y resistencia cada vez mayor, pensando en prolongar la vida útil del vehículo así como en reducir sus costes de mantenimiento.

“Gracias a ello, la industria fabricante de remolques y semirremolques ha logrado rebajar en los últimos años la tara de un semirremolque de tres ejes de 7.000 a sólo 5.700 kilos”, recordó Krone. Refiriéndose a la aerodinámica, Krone indicó que se había conseguido que un tren de carretera de 25 metros, formado por un camión remolcador de tres ejes y un semirremolque de tres ejes con la quinta rueda en un “dolly” de dos ejes del que tira el remolcador, fuese reduciendo su coeficiente aerodinámico Cw desde 0,9 al 0,6; que un conjunto articulado de tractora y semirremolque de tres ejes, bajase su Cw desde 0,8 a 0,5, gracias, entre otras cosas, a la incorporación de cortinas laterales de cierre centralizado para reducir aún más las turbulencias; y que el Cw de un rígido de tres ejes pasase de 0,65 a 0,45.

“La propia patronal alemana VDA recomienda ya el uso de faldones laterales en los semirremolques y en la UE se discute ahora un apéndice aerodinámico posterior que requeriría la autorización de una longitud de medio metro más para los conjuntos articulados”, señaló Krone, añadiendo que un conjunto articulado de 38 toneladas con tara rebajada para permitir 25.000 kilos de carga útil y aerodinámica optimizada podría ahorrar hasta un 10 por ciento en el consumo sólo con usar dos ejes de 10 toneladas en lugar de tres de 9 toneladas y reducir la resistencia a la rodadura mediante cojinetes, engranajes y neumáticos pensados al efecto, disponer de sistemas de recuperación de la energía cinética, contar con generadores de electricidad en los cubos de las ruedas y mejorar la tecnología de las baterias.

“Por eso es tan importante que los legisladores nos dejen un pequeño margen de maniobra para ampliar las dimensiones de los vehículos, aunque fuera con el compromiso de incorporar sólo accesorios aerodinámicos y nunca para ampliar la carga transportada”, insistió Krone.