La filial de la portuguesa TCL se marca un plazo de tres meses para iniciar la actividad.
La nueva terminal de contenedores del puerto exterior de Ferrol podría iniciar su actividad a lo largo del próximo trimestre. Ese es el nuevo plazo que se ha marcado la concesionaria Ferrol Container Terminal (FCT), filial de la portuguesa Terminal de Contenedores de Leixoes (TCL), que continúa sin atreverse a poner una fecha concreta. La compañía está dando actualmente los últimos retoques a la obra, que se encuentra prácticamente finalizada, para poder “prestar un servicio en buenas condiciones desde el primer momento y evitar que los operadores se vayan tras realizar unas pocas escalas”, según señalaron a TRANSPORTE XXI fuentes de FCT.
Hay que recordar que se empieza de cero, ya que el puerto de Ferrol no tiene tradición en el negocio del contenedor. En este sentido, la terminalista, que en las próximas semanas empezará a formar al personal que se encargará de manejar los equipos, ha intensificado la labor comercial para atraer nuevas líneas a la dársena. En principio, según avanzó hace meses el máximo responsable de FCT, Lopo de Castro Feijó, el tráfico de contenedores arrancará con una línea regular europea. La terminal dispone de una superficie total de 300.000 metros cuadrados, aunque el operador pondrá en servicio, en una primera fase, cerca de 60.000 metros cuadrados, con una línea de atraque de 500 metros.
La instalación iniciará su operativa con seis grúas, dos pórtico y cuatro transtainer, procedentes del puerto de Algeciras. Las dos pórtico, de la marca Konecranes, están preparadas para atender portacontenedores de más de 9.000 TEUs y con alcance para 18 filas de cajas a bordo. La terminal cuenta, además, con un almacén de 1.280 metros cuadrados para la consolidación y desconsolidación de contenedores.
El tráfico inicial previsto se sitúa en los 50.000 TEUs anuales, que el operador espera aumentar considerablemente cuando el puerto exterior cuente con acceso ferroviario. La inversión de esta primera fase ronda los 16 millones, aunque el desembolso contemplado para el desarrollo de la terminal asciende a 90 millones. TCL, que forma parte del conglomerado empresarial luso Mota-Engil, cerró 2013 con un tráfico superior a los 621.000 TEUs, lo que supuso una ligera caída del 1,3 por ciento.