Federal Express confía en haber dejado atrás lo peor de la recesión económica global, a pesar de que sus resultados son ‘pobres’ y de que el futuro es “incierto”. En el segundo trimestre de su ejercicio económico FedEx ha conseguido una cifra de facturación de 8.600 millones de dólares, lo que representa un descenso del 10 por ciento con respecto al mismo periodo del año pasado.
El beneficio operativo cayó un 27 por ciento, mientras que los márgenes de rentabilidad pasaron de un 8,2 por ciento el año pasado a un 6,6 por ciento en el corriente. El núcleo del negocio de FedEx, el transporte urgente, ejemplariza el estado de salud del mercado, con un crecimiento modesto del volumen del 4 por ciento, acompañado de una caída de los ingresos del 13 por ciento. El descenso de los sobrecargos de combustible se combinó con el descenso de las tarifas para que los márgenes cayeran a un 6,5 por ciento desde el 8,9 del año pasado.