Flotistas frigoríficos investigados por la Comisión Nacional de la Competencia han logrado una ampliación de cinco días del plazo otorgado por la Dirección de Investigación del organismo para contestar al requerimiento de información solicitado, según ha confirmado TRANSPORTE XXI. El requerimiento enviado a un total de 34 empresas, como publicó este periódico el pasado 15 de diciembre, se añade a la inspección in situ los 11 y 12 de diciembre a las empresas Armesa y Suditrans y a las patronales Astic, Atfrie y Froet. Otras empresas requeridas han expresado “problemas” a la hora de contestar a la petición formal de información solicitadas por la Dirección de Investigación de Competencia, ya que figuran “preguntas incongruentes”, según han afirmado varios empresarios objetos de requerimiento consultados.
Entre las preguntas que ha requerido la Dirección de Investigación de Competencia están el saber cuál es la cuota de mercado de cada empresa en el total del transporte en España o cuáles son las tarifas que aplica a sus clientes. Empresarios consultados coinciden en advertir que gran parte de las preguntas de Competencia no podrán ser respondidas. El requerimiento de información debe ser contestado “punto por punto, en el plazo de diez días y en caso de incumplimiento la Dirección de Investigación puede acordar una multa coercitiva de hasta 12.000 euros diarios y la apertura de un expediente sancionador”.
La Comisión Nacional de la Competencia está investigando una posible fijación de precios y reparto del mercado. Desde la patronal frigorífica Atfrie se ha mostrado “prudencia” a la vez que “indignación por la investigación” abierta por Competencia, advirtiendo que “son los cargadores los que fijan el precio de la campaña”, subrayando que el frigorífico es un negocio de extrema competencia en el que las empresas españolas batallan a diario con sus homólogas europeas. El sector en España maneja una flota de más de 11.000 conjuntos frigoríficos.