Los privados reclaman un interlocutor para encarar la problemática diaria del combinado.
El nuevo organigrama de la Dirección General de Transporte Terrestre de Fomento, al frente de la cual se encuentra Juan Miguel Sánchez, recoge una nueva División de Coordinación y Apoyo a la Innovación del Transporte por Ferrocarril y Carretera, que cuatro meses después de su creación continúa sin equipo y sin dotación, según confirmaron a este periódico fuentes del ministerio.
Entre sus funciones, además de servir de apoyo al director general en el fomento de políticas sectoriales de promoción y desarrollo estratégico, destaca la encomiable labor de control y seguimiento de la ejecución presupuestaria y del contrato- programa con Renfe Operadora, “documento que ya no vale”, porque “la crisis ha hecho que salte por los aires”, según aseguró el propio presidente de la pública, Teófilo Serrano, durante su reciente comparecencia en la Comisión de Fomento del Congreso.
Todo parece indicar que la creación de esta nueva división podría ser un ‘nuevo guiño’ del titular de la cartera de Fomento, José Blanco, al transporte de mercancías por tren. Hay que recordar que además de recuperar la Secretaría General de Transportes y poner al frente de la misma a José Luis Cachafeiro, con amplia experiencia en infraestructuras ferroviarias ligadas a la carga, también traspasó las competencias en la elaboración de proyectos normativos, regulación, ordenación e inspección de la antigua Dirección General de Ferrocarriles a la recuperada Dirección General de Transporte Terrestre, No obstante, “aún es pronto para saber el alcance de esta nueva división y todo dependerá del equipo que finalmente se encuentre al frente de la misma”.
Es la opinión de los operadores ferroviarios privados consultados por este periódico, que insisten en la necesidad de contar con “un interlocutor -además de Juan Miguel Sánchez-, que ayude a solucionar la problemática diaria del transporte combinado”, una actividad que está “muy tocada”. Las mismas fuentes, que temen que esta división se quede finalmente en un tema de “organización interna” del Ministerio, afirman que “nos encontramos muy lejos de Europa y para ponernos al día hay que cambiar muchas cosas dentro del modelo de organización del ferrocarril, para adaptarse a las exigencias de los clientes y a un precio competitivo”. Para eso, insisten los privados, se necesita “un plan de acción inmediato y no estrategias a largo plazo, porque así, con la que está cayendo, no llegamos”.