El lobby presentó su ‘Manifiesto’ en el Europarlamento, sin el ministro Blanco.
Fomento ha vuelto a evitar defender el corredor mediterráneo en Bruselas y ha vuelto a dar la espalda al trabajo realizado por el lobby empresarial Ferrmed. Esa es la principal conclusión de la conferencia celebrada el pasado 12 de enero en Bruselas en la que Ferrmed presentó su ‘Manifiesto’ con la ausencia del ministro español José Blanco
Más de 350 representantes empresariales y políticos valoraron la importancia del corredor mediterráneo en la reunión celebrada el pasado 12 de enero en el Europarlamento para exponer el Manifiesto de Ferrmed mediante el cual la asociación solicita de la Comisión Europea la próxima inclusión en la red ferroviaria principal de mercancías de la Unión Europea del eje denominado Escandinavia-Rhin- Ródano-Mediterráneo Occidental.
Delegaciones de las comunidades autónomas de Cataluña, Comunidad Valenciana, Región de Murcia y Andalucía asistieron a la cita a la que “por razones de agenda” faltó el ministro de Fomento, José Blanco. A la ausencia de Blanco hay que añadir la falta de concreción de los dos altos cargos de Fomento que comparecieron ante el Parlamento Europeo en representación del ministro.
Las intervenciones de los directores generales de Transportes y Redes Ferroviarias de Fomento, Manuel Villalante y Carlos Juárez, respectivamente, fueron decepcionantes para la práctica totalidad de asistentes a la conferencia. Ninguno de los dos fue capaz de concretar si asumían los criterios del lobby Ferrmed para la nueva infraestructura ferroviaria y menos aún se atrevieron a establecer plazos de ejecución o compromisos de inversión. Todo indica que “no hay un euro” y que “no hay un plan” para llevar a cabo las inversiones que se necesitan para reactivar el transporte de mercancías por ferrocarril en España.
De hecho, en referencia a la adaptación de la línea férrea al ancho de vía internacional, la principal exigencia de Ferrmed,Villalante llegó a decir que “los estándares Ferrmed no deben ser un dogma”, para sorpresa de los allí reunidos, matizando que “la voluntad inversora se debe realizar por etapas, atendiendo a la realidad de la posibilidad económica”, finalizando con que “el objetivo final es crear una gran área logística en el corredor que nos haga competitivos en Europa”, así como la duplicación de los tramos de vía única”.
La posición de las diversas delegaciones autonómicas la resumía el consejero de Política Territorial de la Generalitat de Cataluña, Lluís Recoder, señalando que “esta es una prueba de que el corredor mediterráneo no es una prioridad para el Gobierno español; me esperaba un compromiso mayor y contundente, es decepcionante”.
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