Las condiciones de pago, lo peor valorado por los operadores de transporte americanos.
Hay fondos de inversión estadounidenses interesados en comprar compañías españolas en dificultades. Son operaciones que no se acaban de concretar porque los precios de venta no se han ajustado “al valor que se da fuera de España”, pero que probablemente se comenzarán a producir a finales de este año o el próximo, según ha señalado el presidente de la Cámara de Comercio de Estados Unidos en España, Jaime Malet, durante la presentación del barómetro de 2011 de las empresas estadounidenses ubicadas en nuestro país.
Malet no descartó operadores de transporte entre las empresas españolas objeto del deseo de los inversores americanos. El 81 por ciento de las empresas estadounidenses están satisfechas con sus resultados en España, el 52 por ciento creen que crecerán a medio plazo, el 42 por ciento prevén más contratación de personal y un 15 por ciento harán nuevas inversiones, según el barómetro, elaborado por Esade.
Con respecto a las encuestas precedentes, “sigue habiendo incertidumbre, pero hay cierto optimismo por la mejora de la productividad y el aumento de las inversiones y contrataciones”, añadió Jaime Malet. Las empresas encuestadas que pertenecen al sector del transporte, que también engloba comunicaciones y energía, lo que peor valoran son las condiciones de pago ofrecidas y exigidas y las relaciones laborales y sindicales en general, así como las relaciones con las diferentes Administraciones.
UPS, que ha patrocinado el barómetro, “está dentro del 81 por ciento de las empresas americanas que el estudio sitúa como satisfechas con los resultados de su actividad en 2011”, señaló Daniel Carrera, director general de la paquetera en España y Portugal. El volumen de exportación de UPS desde España, donde lleva operando hace más de 20 años, “creció casi un 10 por ciento en 2011”, debido principalmente a los sectores “textil, calzado, tecnología y electrodomésticos”.
Para este ejercicio, las previsiones apuntan a “un buen escenario” para el mercado internacional por la apuesta de las pymes por salir al exterior. Hay alrededor de 550 empresas estadounidenses afincadas en España, que suman una facturación agregada de 70.000 millones de euros, lo que supone el 7 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) español. Estas compañías generan 333.000 puestos de trabajo.