Acciona, con 500 empleados en la fábrica del polígono de la Zona Franca, el principal damnificado por el cierre, que también afecta a Logistran, Sertrans o Salvat Logística.
La salida de Nissan de Cataluña, anunciada por la multinacional el pasado 28 de mayo, será un golpe para sus proveedores logísticos y de transporte de acabar materializándose. La compañía japonesa confirmó oficialmente el cierre de la planta del polígono de Zona Franca, así como sus centros productivos satélite en Montcada i Reixac, dedicado a la chapistería, y en Sant Andreu de la Barca, de bastidores, antes de fin de año.
El principal operador logístico afectado es Acciona Facility Services. La filial de grupo constructor y energético se adjudicó hace dos años el paquete de labores logísticas desarrolladas en los almacenes externos para la planta de Nissan de la Zona Franca, que sumaba a los trabajos que ya venía desarrollando el personal de Acciona dentro de la fábrica. El cierre de Nissan, si se acaba produciendo, afectará a unos 500 trabajadores de Acciona, según fuentes sindicales. “No hay atisbos de que el grupo (Acciona) nos pueda recolocar, el objetivo es que Nissan siga”, señalaron estas fuentes.
Hay otros operadores logísticos que prestan servicios y que transportan piezas de automoción para el fabricante japonés que resultarán damnificados. Según un primer listado elaborado por UGT, las empresas del sector afectadas por el cierre de Nissan son Logistran, Salvat Logística, Sertrans Logistic, Servicios Recipe y Transporte Nicaragua, con casi 50 trabajadores perjudicados. Sin incluir toda la plantilla, 16 trabajadores, de Autocares Font, dedicada al traslado de los empleados de Nissan.
En cuanto a la afectación al transporte de portavehículos, “la repercusión es bastante limitada ya que la producción era baja desde hace unos años”, señalan fuentes de CETM Portavehículos. Salieron 55.405 vehículos de la fábrica de Nissan en 2019. El sector “está más preocupado” porque la alianza Nissan-Renault copie a General Motors cuando decidió dejar de comercializar su marca Chevrolet en el mercado europeo y potenciar Opel (actual marca del Grupo PSA). Es decir, que Nissan deje de comercializar sus vehículos en el mercado europeo y Renault se retire del asiático. Esta operación “sí sería un golpe importante por los flujos de importación de Nissan cuya principal puerta de entrada es el puerto de Barcelona”, añadieron.
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