Califica de “injusta” esta tributación y fija la línea roja en un volumen de operaciones inferior a los 60.000 euros y un camión, tras permitir que 2013 sea un año transitorio.
La Diputación de Guipúzcoa sacará al transporte por carretera del sistema de módulos, más ventajoso fiscalmente que la estimación directa, a partir de 2014. Califica de “injusta” esta tributación y fija la línea roja en un volumen de operaciones inferior a los 60.000 euros y un camión, tras permitir que 2013 sea un año transitorio
El plan original contra el fraude fiscal de Montoro, que éste no llevó finalmente a cabo tras elevar de 50.000 a 300.000 euros el límite para acogerse al sistema de módulos ante el temor a un paro sectorial, tiene su réplica en el País Vasco. La Diputación de Guipúzcoa ha fijado la línea roja a partir de 2014 para hacer la declaración por módulos en 60.000 euros y un vehículo, lo que en la práctica supone excluir al sector de este sistema de tributación, ya que sólo el gasto en combustible para un camión tipo que recorre 120.000 kilómetros al año supera esa cantidad.
Al cierre de esta edición, Vizcaya y Álava no habían terminado la tramitación de la reforma del IRPF, aunque fuentes del sector consultadas por este periódico dudan que vayan en la misma dirección. La Hacienda guipuzcoana, que ha decidido que 2013 sea un año de transitorio tras escuchar las reclamaciones de varias patronales de transporte, permitiendo acogerse al sistema de módulos a aquellas actividades económicas con un volumen de operaciones inferior a los 300.000 euros y dos camiones, califica de “injusto” este sistema.
De hecho, la entidad foral ha practicado liquidaciones paralelas en los últimos cuatro años para corregir la falta de equidad fiscal y tratar de que los impuestos se paguen en función de las ganancias reales. La medida anunciada por la Diputación guipuzcoana encaja con las propuestas planteadas por la mayoría del Comité Nacional, que reclama al Gobierno la eliminación del módulo para 2015 con un período transitorio para permitir a los transportistas una adaptación “no traumática” al nuevo sistema. Las principales organizaciones empresariales de ámbito nacional aseguran que el sistema de módulos “alimenta la distorsión del mercado”, debido a las ventajas fiscales de los autónomos a la hora de tributar, y es “origen de volúmenes importantes de economía sumergida”.
Por el contrario, varias asociaciones de transporte del País Vasco se han mostrado muy críticas con la modificación del régimen de módulos en el IRPF que prepara la Hacienda de Guipúzcoa, que “imposibilita a los autónomos que puedan competir con el resto en igualdad de condiciones”. La patronal Guitrans, que preside Ignacio Cepeda, manifiesta que “no es razonable que una medida de este calado no se tome de manera conjunta”, sobre todo teniendo en cuenta “la negativa trayectoria que está sufriendo el sector de transporte por carretera debido al encarecimiento sucesivo de los costes directos y a la afluencia al sector de un gran número de empresas un tanto cuestionables”.
La patronal, además, mantiene que “esta medida tendente a eliminar los módulos no puede acometerse sin poner en marcha previamente un plan estratégico”, que aborde, entre otras cuestiones, la financiación del circulante, la concentración empresarial y la formación. En la misma línea, el sindicato de transportistas Hiru exige al Ejecutivo Foral que abra una verdadera negociación con el sector de cara a poner en marcha un “plan integral de rescate que permita, entre otras cosas, la eliminación del sistema de tributación por módulos”.
El módulo en Guipúzcoa
La Diputación de Guipúzcoa, tras escuchar al sector, ha decidido que 2013 sea un año transitorio, permitiendo acogerse al sistema de módulos aquellas actividades económicas con un volumen inferior a los 300.000 vehículos y un máximo de dos camiones.
A partir de 2014, se reduce la posibilidad de acogerse al sistema de módulos a los negocios de menos de 60.000 euros y un camión como límite, lo que en la práctica supone la exclusión del sector del transporte poor carretera de este sistema de tributación, ya que sólo el gasto en combustible para un camión tipo que recorre 120.000 kilómetros al año supera esa cantidad.