La naviera alemana Hapag-Lloyd cerró su tercer trimestre fiscal con un resultado operativo de 36,7 millones de euros, lo que eleva el resultado de los primeros nueves meses del ejercicio a 78,8 millones de euros. El EBITDA de la compañía fue de aproximadamente 275 millones de euros entre enero y septiembre. El beneficio después de tasas e intereses fue de 9,6 millones en el tercer timestre, lo que lo convierte en el mejor trimestre del año. “Hemos obtenido muy buenos resultados en un entorno muy demandante.
El resultado operativo de Hapag-Lloyd está muy por encima de la media de la industria”, defiende Michael Behrendt, presidente del consejo de administración de la naviera. La incertidumbre económica, las turbulencias del mercado de divisas y los altos precios del bunker son la condiciones de mercado a las que se refiere Behrendt. En los nueve primeros meses del año, Hapag-Lloyd ha generado un cash flow positivo de 186,8 millones de euros (41 millones solo en el tercer trimestre). La media tarifaria del armador alemán fue de 1.540 dólares por TEU entre enero y septiembre, a la par con la cifra del año pasado.
El volumen transportado aumentó un 3,9 por ciento hasta los 3.874 millones de TEUs. Sin embargo, y en comparación con el mismo periodo del año pasado, los costes crecieron en más de 333 millones de euros, debido principalmente al aumento de los precios del bunker. Este apartado ha sido un factor que ha reducido significativamente los beneficios potenciales de la compañía germana. Los ingresos del tercer trimestre alcanzaron los 1.540 millones de euros, mientras que en idéntico periodo de 2010 fueron de 1.780 millones de euros.