Isuzu estudia usar Arabia Saudí como base para fabricar camiones que serían comercializados en ese mercado y también exportados a los países de la ribera occidental del Golfo Pérsico.
Como otros fabricantes japoneses, Isuzu está muy preocupada por la fuerte revalorización del yen y considera la posibilidad de reubicar una parte de su producción de vehículos -camiones en este caso- en otros países. Isuzu ensamblaría en Arabia Saudí camiones a partir de componentes que llegarían procedentes de las fábricas que la nipona tiene en Japón, Tailandia, Indonesia y China.
El proyecto se encuentra muy avanzado, ya que Isuzu pretende comenzar a fabricar sus camiones de medio tonelaje antes de que concluya el presente año. El objetivo sería alcanzar una fabricación de 600 unidades con destino a la propia Arabia Saudí en el primer ejercicio fiscal completo, que como la mayoría de las firmas japonesas, se iniciará el 1 de abril de 2013.
Isuzu pretende también que una parte de la producción saudita sea exportada a países próximos desde el mismo año fiscal 2013. Dicha producción se vería ampliada más adelante con camiones pesados, de manera que la cifra total de vehículos fabricados fuera de 1.500 por año.
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