Ni el Institutional Shareholder Services (ISS) de Estados Unidos, ni el iVOX alemán, ni las gerencias de Scania y MAN. Ha sido el comisario para la Competencia, Joaquín Almunia, el que ha dado el alto a Ferdinand Piëch, presidente de los consejos de supervisión de MAN, Volkswagen (VW) y Scania en sus maniobras para nombrar cinco de los ocho miembros del consejo de supervisión de MAN, aprovechando la reciente junta general de accionistas de esta última compañía.
Y es que Almunia ha recordado a Piëch que no puede tomar más medidas encaminadas a la consolidación de las actividades de VW, MAN y Scania hasta que su Comisaría no haya dado el visto bueno al proyecto, cosa que aún no ha ocurrido. “No se puede tomar el control de MAN antes del dictamen de la Comisión”, declaró un portavoz del comisario de la Competencia.
El ISS, un organismo de gran influencia en el mundo anglosajón, y el iVOX alemán, una organización que asesora a 14 grandes inversores germanos, habían recomendado a los accionistas de MAN unos días antes de la junta que votasen contra las nominaciones de Piëch, pues le darían un control exagerado del consejo de MAN. Pero ha sido el comisario Almunia el que se ha cruzado en el camino de Piëch, así que a Volkswagen no le ha quedado otro remedio que abandonar su intento a la espera demejor ocasión.