Las ventas del grupo logístico suizo, que está entre las 9 multinacionales acusadas de fijar precios en la industria transitaria de la carga aérea, descendieron un 19% en 2009.
Aunque los resultados de 2009 no sorprendieron a nadie, el grupo logístico suizo, líder del tránsito internacional europeo, mantiene su optimismo frente a la evolución del mercado y de la demanda. Sin embargo, la amenaza de multa multimillonaria por acordar sobrecargos pende sobre la cabeza de la empresa con sede en Zurich
Kuehne+Nagel acaba de presentar sus resultados del ejercicio 2009, y sin sorpresas, pues las cifras muestran una fuerte caída de los ingresos, y una más modesta disminución de los beneficios. La cifra de negocios del operador logístico suizo alcanzó los 11.900 millones de euros, lo que representa un descenso del 19,4 por ciento con respecto a 2008. El EBITDA de la empresa sólo retrocedió un 13,2 por ciento (604 millones de euros), lo que supuso un incremento del márgen entre 2008 y 2009 del 0,4 al 5,1 por ciento. El EBIT, por su parte, se derrumbó un 19,3 por ciento, en gran parte debido a la depreciación de la cartera inmobiliaria de la empresa.
Por unidades de negocio, los resultados fueron atípicos teniendo en cuenta que las actividades de tránsito marítimo y aéreo obtuvieron cifras similares. Los ingresos del transporte marítimo cayeron un 24,5 por ciento, mientras que el aéreo reculó un 26 por ciento (aunque esta unidad experimentó una fuerte caída del EBITDA con un 28,1 por ciento). La sección de servicios logísticos cerró el año con una fuerte depreciación de los activos inmobiliarios, lo que afectó al EBIT con una caída del 37 por ciento.
Los ingresos fueron similiares a los de 2008, lo que mantuvo los márgenes bajos a pesar del tamaño del negocio. La unidad de transporte por carretera y ferrocarril sufrió un descenso del 12 por ciento en sus ingresos, y ello a pesar de las adquisiciones realizadas en 2007 y 2008. En comparación con el ejercicio anterior, el márgen del EBITDA creció de un 0,8 por ciento a un 2,1 por ciento, y el resultado operativo se disparó un 126,1 por ciento, pero a partir de una base de negocio muy baja, y también bajo la influencia de las adquisiciones previas.
El último trimestre trajo una recuperación en los volúmenes transportados, aunque las condiciones aún siguen siendo complicadas para los transitarios a medida que las empresas armadoras y las aerolíneas han vuelto a aumentar sus tarifas. En el último trimestre de 2009, los ingresos cayeron un 13 por ciento, y el EBITDA retrocedió un 23 por ciento, es decir, empeorando aún más la tendencia de los trimestres anteriores.
Los analistas sugieren que los resultados del último trimestre muestran que K+N podría estar sufriendo un debilitamiento de sus márgenes operativos de transitario. A pesar de todo, la suiza mantiene su optimismo. Sin embargo, una espada pende sobre K+N. La compañía ha realizado una provisión de fondos de 24 millones de euros previendo una posible multa de las autoridades de defensa de la competencia de Estados Unidos, la Unión Europea, y Suiza.