La concesionaria de la nueva terminal del puerto de Barcelona cierra la operación seis meses después de la detención de José Mestre por un presunto delito de narcotráfico.
Hutchison ha elevado su participación en Tercat del 70 al 90 por ciento, adquirida al Grupo Mestre. La operación se ha realizado a un precio “irrisorio” en comparación con lo que el terminalista asiático habría pagado al grupo catalán antes de la detención de José Mestre, el pasado verano, por un presunto delito de narcotráfico
El terminalista asiático Hutchison Port Holdings ha elevado su participación del 70 al 90 por ciento en Terminal Catalunya (Tercat), la concesionaria de la nueva terminal de contenedores del muelle Prat del puerto de Barcelona. El 20 por ciento ha sido adquirido a Grupo Mestre, en una operación de compra que se ha realizado “por un precio irrisorio” en comparación con lo que habría pagado Hutchison al grupo catalán antes de la detención el pasado verano de José Mestre, según han asegurado fuentes solventes.
Mestre permanece en prisión acusado de ser uno de los presuntos cabecillas españoles de la red de narcotráfico internacional que pretendía convertir la dársena catalana en puerta de entrada de grandes cantidades de cocaína procedente de Suramérica. Desde Tercat declinaron hacer declaraciones. TRANSPORTE XXI ya avanzó el pasado verano que el escenario más probable era que Hutchison ejecutara la opción de compra que tenía del 30 por ciento de Tercat en manos de Mestre a coste cero por los daños causados.
En el momento de la detención, que se produjo en la terminal, donde la policía localizó el alijo de droga, José Mestre era el director general de la estibadora. “Posiblemente, no se ha quedado con el 100 por ciento de la participación de la familia Mestre porque sobre el 10 por ciento que queda debe pesar un embargo judicial”, añadieron otras fuentes. El caso, bautizado como Operación Guadaña, sigue siendo instruido por el juez de la Audiencia Nacional, Francisco Andreu.
José Mestre “continúa en prisión sin fianza”, según fuentes judiciales. Tras la detención de José Mestre, Hutchison se hizo con la gestión de la terminal y puso como director general a un hombre de confianza del grupo asiático. Guillermo Balcastro, que era director financiero de la estibadora, sustituía a Mestre. Hutchison tomaba así las riendas de Tercat, que hasta entonces estaba en manos de Mestre, a pesar de su participación minoritaria.
Ahora, Hutchison refuerza su capacidad de gestión adquiriendo casi la totalidad del capital social. La familia Mestre se alió con Hutchison, uno de los principales terminalistas mundiales, para hacerse con la concesión del muelle Prat, que la Autoridad Portuaria de Barcelona adjudicó en mayo de 2006. El terminalista asiático adquirió el 70 por ciento de Tercat a la familia Mestre por 150 millones de euros, a través de la sociedad Servicio Material Portuario.
Cronología
Diciembre de 2005: Se anuncia la entrada de Hutchison Port Holdings en el capital de Tercat para optar a la nueva terminal de contenedores del muelle Prat del puerto de Barcelona.
Mayo de 2006: La Autoridad Portuaria de Barcelona adjudica a Tercat, participada en un 70 por ciento por Hutchison y en un 30 por ciento por el Grupo Mestre, la nueva terminal del muelle Prat.
Agosto de 2006: Tercat adapta sus estatutos al pliego de condiciones del concurso y refleja la participación del 70 por ciento de Hutchison en la sociedad.
1 de enero de 2007: Se desplazan 640 metros de cajones que forman la línea de atraque del muelle Prat.
22 de junio de 2010: Agentes de la Policía Nacional detienen a José Mestre tras localizar en la estibadora un contenedor con 202 kilogramos de cocaína pura.
29 de junio de 2010: Hutchison comunica a sus clientes que sustituye a José Mestre como director general de Tercat por Guillermo Belcastro.
Septiembre de 2010: El puerto de Barcelona entrega a Tercat la primera fase del muelle Prat.
Enero de 2011: Hutchison formaliza la adquisición del 20 por ciento más de Tercat.
Tercat inicia la obra civil para empezar a operar en la nueva terminal semiautomatizada del muelle Prat a partir de 2012
Hutchison Port Holdings ha pasado a controlar el 90 por ciento de Tercat a un año vista de la entrada en funcionamiento de la nueva terminal en el muelle Prat del puerto de Barcelona, que tendrá capacidad para mover 1,5 millones de TEUs al año en una primera fase. La estibadora ha iniciado la obra civil de la terminal durante este mes de enero, que ejecuta la unión temporal de empresas (UTE) formada por Ferrovial y Comsa Emte.
Tercat empezará a operar en la nueva terminal, la joya de la corona de la ampliación del puerto de Barcelona, a finales de este año o principios de 2012, es decir, con tres años de retraso sobre el calendario inicial. Demora provocada por el hundimiento parcial del muelle el 1 de enero de 2007. La Autoridad Portuaria de Barcelona entregó a Tercat el pasado septiembre el 60 por ciento del total de las 100 hectáreas de la terminal y 1.000 de los 1.500 metros de línea de atraque de la fase no afectada por el hundimiento.
Tercat empezará a operar con ocho grúas super-postpanamax, construidas por Zhenhua Port Machinery Company (ZPMC), además de 36 grúas automáticas, suministradas por KoneCranes. La estibadora incorporará un sistema operativo automatizado de terminales desarrollado por Hutchison. La nueva terminal será una de las pocas del mundo en tener automatizada la explanada de almacenaje de contenedores.
La estibadora invierte en la puesta en marcha de la nueva terminal 515 millones de euros, de los que 205 millones destina a obras de superestructura y 310 millones a la adquisición de maquinaria. Aunque los nuevos accesos ferroviarios al puerto de Barcelona, actuación que depende del Ministerio de Fomento, siguen en el aire, la nueva terminal ya se estrenará con una estación ferroviaria con ocho vías. Para la entrega de la parte afectada por el derrumbe, no hay fijado un calendario. “Ya no hay prisa, lo urgente era entregar la primera fase para que Tercat pudiera empezar a trabajar lo antes posible en la nueva terminal”, señalaron fuentes de la Autoridad Portuaria de Barcelona.