La APIE propone agotar las jornadas acumuladas de festivos y jubilaciones anticipadas para evitar el expediente, mientras los sindicatos exigen realizar el transporte horizontal.
La brusca caída de los tráficos en el puerto de Bilbao ha puesto al sector de la estiba al borde de un ERE. Las estibadoras han propuesto agotar las jornadas acumuladas de festivos y un pacto individualizado de prejubilaciones para evitar el expediente, mientras los sindicatos exigen acabar con el intrusismo y realizar el transporte horizontal
La brusca caída de la actividad en el puerto de Bilbao, que perdió en enero más de un 44 por ciento de sus tráficos de carga seca, ha puesto al sector de la estiba al borde de un expediente de regulación de empleo. Según señalaron a este periódico fuentes sindicales, Bilboestiba APIE intenta agotar todas las vías posibles antes de la aplicación de un ERE y ha planteado al comité de empresa de la sociedad de estiba una serie de medidas.
En concreto, las empresas estibadoras proponen el disfrute de las jornadas acumuladas de festivos -unas 3.000 en estos momentos, lo que supone un colchón de tres meses- y un pacto individualizado de prejubilaciones, que afectaría a unos 50 trabajadores en los próximos tres años. De este modo, aún manteniéndose los actuales porcentajes de tráfico en el puerto, las estibadoras podrían sortear, al menos durante este año, la aplicación de un expediente de regulación de empleo en la estiba, apuntaron las mismas fuentes.
Al cierre de esta edición, la mayoría de los sindicatos que forman parte del comité de empresa, liderado por Coordinadora, no se habían pronunciado sobre el plan propuesto por la patronal, aunque sí han decidido unir sus fuerzas para poner fin al “intrusismo que existe en el puerto de Bilbao” y reclamar la realización del transporte horizontal vinculado a la carga y descarga de buques, labor contemplada en la Ley 48/2003 y en el vigente convenio colectivo de estiba y desestiba del enclave vasco.
El desempeño de esta actividad, que supone una vieja reivindicación del sector, permitiría dar trabajo diariamente a unos 40 portuarios. Así lo pusieron de manifiesto fuentes de UGT, que explicaron que no se trata de echar a los transportistas que están realizando este trabajo, sino que lo que piden es que las empresas estibadoras faciliten la relación de las personas que ejercen esta función para que tengan prioridad a la hora de realizar la primera jornada, dejando, eso sí, las siguientes, en caso de que se necesitasen más, para los portuarios.
UGT, en este sentido, ha denunciado la existencia de transportistas que realizan jornadas de 18 horas, llegándose a dormir en ocasiones al volante del camión, lo que supone un grave riesgo para la seguridad del personal que trabaja en la dársena.