El sector pide mejoras tanto en las terminales como en los servicios de ‘handling’ en rampa y de inspección para agilizar el paso de la mercancía en la red de aeropuertos de Aena.
Congestión en los muelles de las terminales de carga en los días punta, retrasos en los servicios de inspección por falta de personal y unos servicios de handling en rampa (el transporte de equipajes, mercancías y correo desde el avión a las terminales) que priman al pasaje sobre la carga son males que cíclicamente afectan al transporte aéreo de mercancías en España, sobre todo, a los dos principales aeropuertos, Barajas y El Prat.
Feteia-Oltra y el Consell d’Usuaris del Transport de Catalunya reclamaron recientemente a Aena y Aviación Civil una auditoría de los servicios que prestan las terminales, ya que, a juicio de transitarios y cargadores, “no se cumplen los mínimos estándares de calidad”, señala un comunicado conjunto.
“La Administración tiene que controlar la calidad del servicio y detectamos dejadez en esta función”, señala Martín Fernández, secretario técnico de Feteia-Oltra, a Transporte XXI.
“Son cuatro horas de espera entre que aterriza el avión hasta que se recoge la mercancía” para un bulto en ‘canal verde’. Una espera que se multiplica por dos “en día punta o una campaña especial”. Está claro que “las mercancías no van tan rápido como las maletas”, asegura. “La estrategia de Aena es otorgar una terminal a quien pague más”, señala Rosa Prenafeta, directora del Consell d’Usuaris. Aena debe “marcar estándares mínimos de calidad y velar para que se cumplan y no solo fijarse en el precio”, añade.
Transitarios y cargadores coinciden en que se tendría que avanzar hacia un modelo de marcas de calidad que han implantado puertos como Barcelona y Valencia. También habría que copiar de los puertos, a juicio de Martín Fernández, “el posicionamiento único del contenedor (aéreo)” para pasar todos los controles aduaneros a la vez. Para Javier Arán, vicepresidente de Foro MADcargo, “la decisión de un PIF único para la inspección es un tema recurrente que hay que analizar con extrema atención para no provocar sobrecostes y retrasos en la operativa”. Los operadores de handling de carga “han invertido para dotarse de instalaciones PIF autorizadas en sus terminales, con un coste elevado y continuas reformas fruto de los cambios en la normativa”, argumenta.