La Comisión Europea (CE) ha diseñado una estrategia por la que los camiones emitirán cantidades inferiores de dióxido de carbono (CO2). La estrategia se centra en medidas a corto plazo para certificar, notificar y controlar las emisiones de los vehículos pesados.
Una vez en vigor esta legislación, la CE podría fijar límites obligatorios para las emisiones medias de CO2, promover infraestructuras que permitan la utilización de combustibles alternativos para los vehículos pesados o aplicar tarifas “más inteligentes” por el uso de las infraestructuras.