El puerto recupera el tráfico de contenedores con Canarias tras la nueva vuelta de Boluda.
Marín recupera el pulso al tráfico de contenedores. La naviera chilena CCNI ha ampliado las escalas mensuales en su línea entre la costa oeste de Suramérica, Centroamérica, Caribe y el norte de Europa, con lo que afianza su operativa en el puerto marinense, mientras Boluda lleva de nuevo a este puerto su línea con Canarias, que podría aportar unos 30.000 TEUs al año
La naviera chilena CCNI, que hace dos años trasladó de Vigo a Marín su línea del norte de Europa, consolida su apuesta por el puerto marinense tras ampliar recientemente sus escalas mensuales. La compañía, que operaba dos servicios quincenales -importación y exportaciónentre la costa oeste de Suramérica, Centroamérica, Caribe y el norte de Europa, ha convertido esta línea en decenal. De este modo, el servicio regular de contenedores y carga convencional pasa a tener entre cinco y seis escalas mensuales, según señalaron a este periódico fuentes de la naviera.
Para ello, la chilena CCNI ha incorporado dos nuevos buques a la línea, servida ahora por un total de siete unidades. Al mismo tiempo, el puerto de Marín ha recuperado el tráfico de contenedores con las Islas Canarias tras el regreso del Grupo Boluda, a caballo entre Marín y Vilagarcía. La nueva llegada de Boluda supondrá un importante impulso al tráfico de contenedores en el puerto marinense. De hecho, la terminal de contenedores del puerto, que gestiona el grupo Pérez Torres, movió en los dos primeros meses de este año 1.290 TEUs, lo que supuso un descenso próximo al 80 por ciento, derivado de la pérdida de la línea con Canarias, que ahora ha vuelto a recuperar. La incorporación de este servicio aportará un tráfico de cerca de 30.000 TEUs al año a Pérez Torres, que cerró 2008 con un tráfico de 29.160 TEUs y una caída superior al 37 por ciento.
Fuentes del sector atribuyen la vuelta de Boluda a Marín a problemas operativos en la terminal de contenedores de Vilagarcía, que gestiona Tercovi, filial de Contenemar. Este grupo, sin embargo, asegura que dejó de operar “por presiones de la terminal de Marín y algún cliente de este puerto y no por falta de servicio”.
El puerto de Marín, por otra parte, ha finalizado recientemente la ampliación de su Puesto de Inspección Fronterizo (PIF), que permite duplica su capacidad actual para la inspección de contenedores. Las obras se basaron en la ejecución de un anexo al edificio existente en el que se ubicó una ampliación de la antecámara del servicio de Sanidad y Consumo con dos nuevas bocas para labores de carga y descarga.