La Comunidad de Madrid inspeccionó más de 25.000 vehículos de transporte profesional de enero a junio en la región a través de controles en ruta, controles de peso y por medio de inspecciones periódicas de las empresas del sector. La cifra representa un descenso significativo de las inspecciones con respecto al mismo período del año pasado en el que se controlaron más de 35.000 vehículos.
La Comunidad de Madrid ha continuado en la línea marcada en los últimos años en materia de inspección, concediendo especial protagonismo a los controles en ruta al transporte de mercancías, así como a los específicos al exceso de peso en los camiones.
En concreto, en el primer semestre del año se realizaron 59 controles ordinarios en ruta, en colaboración con las fuerzas de seguridad del Estado y policías locales, en los que se inspeccionaron un total de 14.411 vehículos de transporte. A estos controles se sumaron otros 24 coordinados con el resto de comunidades autónomas y en los que se analizaron 547 vehículos en la Comunidad de Madrid.
Además, los técnicos regionales llevaron a cabo 148 campañas específicas dedicadas a un tipo concreto de transporte, entre los que se encuentran los áridos y escombros, las mercancías peligrosas y mercancías perecederas.
En estas campañas se controlaron un total de 4.284 vehículos. Por otro lado, se realizaron controles de peso a unos 4.000 vehículos, a través de las seis básculas fijas para camiones de las que dispone la Comunidad de Madrid y a las que hay que sumar otras nueve básculas móviles. Además, las inspecciones se completaron con la comprobación de las jornadas de trabajo de más de 1.800 camiones y la visita a más de 700 empresas para controlar a otros 2.381 vehículos.