La Autoridad Portuaria obligará a ‘blindar’ los nuevos diques si se arruinan por vicios ocultos de la construcción y solicita un seguro a todo riesgo de 240 millones de euros.
La firma constructora que inicie en marzo las obras de abrigo de la ampliación norte del puerto de Valencia deberá responder de su estado durante quince años a partir de 2012, una vez finalice la obra. La Autoridad Portuaria de Valencia ha obligado a blindar los diques por si se arruinan en el futuro por vicios ocultos de la construcción
La Autoridad Portuaria de Valencia, que preside Rafael Aznar, ha incluido en el pliego de condiciones del proyecto de obras de abrigo de la ampliación norte del puerto de Valencia, que acaba de sacar a concurso por un importe de 240 millones de euros (sin IVA), una garantía adicional a la tradicional de un año que tienen las obras portuarias en España, así como a la suscripción de un seguro a todo riesgo por el valor del importe de licitación de la obra de ampliación.
En concreto, la constructora que gane la licitación del grueso de la obra de ampliación norte deberá responder de su estado durante quince años a contar desde la recepción del proyecto terminado, “si la obra se arruina con posterioridad a la expiración del plazo de garantía por vicios ocultos de la construcción”, en lo que sería un incumplimiento del contrato por el contratista por el que deberá responder de los daños y perjuicios durante ese periodo fijado por el puerto. Una vez transcurrido el plazo sin que se manifieste ningún daño o perjuicio, la responsabilidad de la constructora quedará totamente extinguida.
Sin duda, la medida adoptada por el puerto de Valencia en el pliego del proyecto, cuyas ofertas se desvelarán el próximo 4 de febrero, tiene su importancia debido al efecto que para el sector de la construcción y para las autoridades portuarias ha supuesto la catástrofe del Muelle Prat ocurrida hace un año en Barcelona, principal rival de Valencia en el Mediterráneo. Asimismo, el puerto de Valencia ha blindado los requisitos exigidos a las constructoras que opten al concurso, ya que las mismas deberán tener una solvencia económica con un mínimo de volumen de negocio anual de 1.500 millones de euros de obras realizadas durante el último año y una solvencia técnica de 750 millones de euros anuales de importe mínimo de obras ejecutadas.
Las obras de abrigo de la ampliación norte, que deberán iniciarse el próximo 1 de marzo con un plazo de ejecución de 42 meses, se iniciarán con la formación de una explanada de acopios de 14 hectáreas para a continuación iniciar el tramo de talud del dique de 3.360 metros de longitud, con medios terrestres y marítimos hasta llegar al entronque con el dique vertical. En paralelo se habrá procedido al dragado de la zanja de cimentación, formación de la banqueta de apoyo de los cajones del dique y fabricación de los mismos. Los cajones deberán estar fabricados y acopiados, de manera que el fondeo de los mismos pueda hacerse sin solución de continuidad, desde el primero hasta el último, simultaneándose esta operación con el relleno de las celdas.
Una vez que el dique ofrezca suficiente abrigo, se iniciará el avance del contradique de 1.100 metros de longitud, realizando su construcción con las unidades de acabado del dique principal. Por último, Rafael Aznar ha confirmado a este periódico que el puerto sacará a finales de 2008 o a comienzos de 2009 el concurso para la construcción y explotación de las dos terminales de contenedores con que contará la ampliación norte. Tanto la construcción del muelle, el relleno y pavimentado de las explanadas y la maquinaria será financiado por las empresas concesionarias.