La medida afectará a un tercio de su plantilla en las plantas castellano-leonesas.
La crisis de Renault en sus plantas de Castilla y León ha sacudido también al operador logístico CAT, que estudia plantear un ERE para su personal en las factorías del grupo automovilístico en la región. La medida está previsto que afecte a un tercio de las 150 personas en plantilla con las que cuenta actualmente en las factorías de Valladolid y Palencia
La crisis de las factorías castellano- leonesas de Renault, que ha dado lugar a un expediente de regulación de empleo (ERE) de suspensión por parte del fabricante para sus plantas de Valladolid y Villamuriel de Cerrato (Palencia), ha sacudido también de lleno a las empresas del sector del transporte y la logística que operan en dichas factorías. El principal afectado es el operador logístico CAT, que según fuentes solventes ha puesto ya encima de la mesa de los sindicatos la propuesta de plantear un ERE que afectaría a un tercio de la plantilla que ejerce su actividad en las factorías castellano- leonesas de Renault. CAT opera en las plantas de Renault a través de las empresas CAT Manipulaciones (Valladolid y Palencia), CAT Handling (Valladolid y Palencia) y Vehicle Control (Valladolid). Todas estas empresas realizan actividades logísticas dentro de las dos mencionadas factorías. En total, estas sociedades dan empleo a más de 150 trabajadores entre las dos factorías de Renault en Castilla y León.
Negociación abierta En las próximas semanas está previsto que mantengan reuniones los responsables de CAT y los sindicatos en la búsqueda de un acuerdo, que se concretaría sobre la base de la presentación de un ERE pactado de suspensión, capeando así la conflictividad que acarrearía la extinción de contratos. Además de la logística, CAT se encarga de la mayor parte de la actividad de transporte de vehículo terminado, así como del abastecimiento de recambios y cargas en general. En el caso del transporte, esta actividad ha descendido, según fuentes solventes, hasta niveles cercanos al 40 por ciento sobre la media que venía experimentado en los últimos años. En cualquier caso, CAT subcontrata la práctica totalidad de la actividad de transporte relacionada con Renault, por lo que el mencionado ERE no afectará a esta rama de la compañía.
El grupo CAT alcanzó una facturación de 225,09 millones de euros en 2006, según datos del Registro Mercantil, lo que le situó en el puesto 14 del ranking “¿Quién manda en el transporte en España?”, que elabora TRANSPORTE XXI. En el caso de Renault, por su parte, la crisis económica no es el único argumento para entender las claves de la crisis por la que atraviesa actualmente en sus plantas españolas, especialmente en el caso de Valladolid. Es más, en el transfondo del asunto está la fallida apuesta del fabricante francés por el modelo Modus, que es el que se fabrica actualmente en la factoría de carrocería y montaje vallisoletana.
Esta situación ha provocado que desde diversos frentes se haya llegado a poner en cuestión la viabilidad de la esta factoría. Este no es el caso de la planta del grupo francés en Palencia, cuya viabilidad parece estar fuera de toda duda, según las citadas fuentes, y cuya problemática actual es similar a la que padecen el resto de fabricantes en nuestro país, es decir, el descenso imparable en las ventas de vehículos. Por otra parte, las fuentes sindicales consultadas no descartan que en las próximas semanas se produzca la aparición en cascada de otros EREs en el sector ligados a la crisis de Renault, principalmente en la planta de Valladolid. En esta planta operan Transportes Pardo Freijo (70 empleados), Giraud Ibérica (40 trabajadores) y Ceva Logistics (60 trabajadores), entre otros.